Nikki Haley pondrá fin a su carrera presidencial tras el triunfo de Trump en el Supermartes, pero, de momento, no le concede su respaldo.
Nikki Haley pondrá fin a su carrera presidencial tras el triunfo de Trump en el Supermartes, pero, de momento, no le concede su respaldo.
Fulanito Pérez sale del baño. Siento tremendo asco: los mensajes a las alumnas vienen desde hace meses. Le digo todo lo que he visto. Me arrebata el teléfono.
Haití sumida en el caos: las bandas liberan a 5.000 presos, cierran aeropuertos y desafían al gobierno del primer ministro Ariel Henry; se impone el toque de queda.
El Supermartes es la jornada electoral más importante de la temporada de primarias presidenciales. Se contarán los votos en 16 estados y un territorio.
“Interesa, sobre todo, fijar la imagen de ese joven poeta iconoclasta que aprovecha todas las oportunidades para hacerse visible y se mueve con libertad entre ‘los pajes, los comunistas y los sultanes’”.
Nikki Haley gana las primarias de Washington D.C., marcando su primera victoria en la carrera por la nominación del Partido Republicano contra Trump.
Procedente de una ley de 1952, el “parole” permite al presidente admitir en Estados Unidos a personas por razones humanitarias urgentes o por un beneficio público significativo.
Al menos 10 migrantes resultaron heridos tras caer el sábado desde un muro fronterizo en California. El Departamento de Bomberos declaró un incidente con “víctimas en masa”.
La noción gremial en torno a la ética y decadencia de la crítica en los predios del arte cubano en las redes, específicamente el battle field en el que se han convertido Hypermedia Magazine & Review durante las últimas semanas, nos ha puesto a todos un poco eufóricos, tensos los unos con los otros.
Un día ella me llamó por teléfono: “Me aburrí del futbolista. ¿Quieres volver conmigo?” Y yo le dije: “Si el amor aflojara sus riendas, todos los seres que ahora se aman se harían guerra cruel; y si actualmente provocan movimientos armoniosos, entonces rivalizarían por destruir la máquina del universo”.
El Estado cubano es patriarcal y autoritario en extremo. Para ese tipo de Estados, resulta medular impedir el feminismo. Pero esa es una tarea imposible. El pasado 8 de septiembre, el autoritarismo patriarcal fue contestado con girasoles. El extrañamiento que produce una imagen de este tipo corrompe la solemnidad sobre la que se pretende legitimar la represión.
Después de nueve meses sin poder salir de Cuba, una amiga me invitó a entrevistar a Ai Weiwei en el Museo de Brooklyn. Allí nos conocimos. Hablamos ante el público y me di cuenta de que Cuba y su activismo no le importan a nadie. Cuba no es China. Nadie va a hacer por nosotros lo que nosotros tenemos que hacer. Ese fue el efecto que Ai Weiwei tuvo en mí.