“Un libro así debería poder ser leído en los más de siete mil idiomas que existen. Seguro que en cualquiera de ellos provocaría la misma sonrisa, un tanto amarga, que el original”.

“Un libro así debería poder ser leído en los más de siete mil idiomas que existen. Seguro que en cualquiera de ellos provocaría la misma sonrisa, un tanto amarga, que el original”.
Oriette D’Angelo (Caracas, 1990). Escritora, artista visual y académica. Autora de los libros: ‘Pájaro que muerde. Diario de Iowa, 2018-2019’ (2022); ‘Inquietud’ (2021) y ‘Cardiopatías’ (2016); este último Premio para Obras de Autores Inéditos, 2014.
El 20 de noviembre de 2009, el periodista independiente Reinaldo Escobar emplazó al agente del G-2 agresor de su esposa, la bloguera Yoani Sánchez, a un debate en plena vía pública.
“Dos artefactos explosivos colocados a lo largo de la carretera que conduce al cementerio fueron detonados a distancia por terroristas”, según declaró un funcionario iraní.
El senador Bob Menéndez se enfrenta a nuevos cargos en una acusación revisada por presuntamente utilizar su influencia para negociar un acuerdo de inversión qatarí.
El atentado tuvo lugar en un barrio chií de Beirut, conocido por ser un bastión de Hezbolá, lo que puede desembocar en una guerra total en la frontera norte de Israel.
María A. Cabrera Arús aborda en sus investigaciones el impacto de la cultura material en la legitimación de regímenes socialistas. Es creadora y gestora del proyecto Cuba Material, un archivo de la cultura material cubana.
Las prestaciones de la Seguridad Social aumentan un 3,2% para más de 71 millones de estadounidenses en 2024, reflejando los ajustes por el aumento del coste de la vida, con un nuevo calendario de pagos.
El papa Francisco condena la represión de la Iglesia católica en Nicaragua, tras la detención de sacerdotes y un obispo.
La obra de Pepe Martín, artista mexicano instalado en Los Ángeles, se orquesta sobre la base de la ficción, el culto al legado, la admiración como ejercicio de humildad y la invención como inequívoco impulso creador.
Luis Manuel Otero asusta, y mucho, porque no pueden comprarlo ni sobornarlo. No es de los que vende baratijas de colores con la enseña nacional. No es de los que ruega el espaldarazo institucional. Ha ido al extranjero y siempre ha regresado a la semilla. Sus antecedentes artísticos no pueden ser fácilmente utilizados en su contra.
Rogelio Orizondo y yo hablamos de cuerdas pulsadas, sonidos precisos y canciones tristes, y yo le menciono la cola del T-Rex y él me dice que se enamoró de un velocirráptor. Después ocurre un intercambio de textos que tienen en la metáfora del sexo un enclave hambriento.