Mía MP (Cuba, 1983) es poeta, narradora y fotógrafa. Su trabajo es una singular fusión de artes visuales y escritura.

Mía MP (Cuba, 1983) es poeta, narradora y fotógrafa. Su trabajo es una singular fusión de artes visuales y escritura.
Llama la atención que los académicos afroestadounidenses, defensores de los derechos civiles y de las minorías en su país, no pregunten por los presos políticos o los derechos humanos en Cuba.
Los totalitarismos son enemigos mortales del tiempo y de la dialéctica. Cada día es el mismo día.
“Ciento setenta y dos años parecen ser mucho tiempo para mantener vivo el recuerdo de una persona”.
Por la puerta-Mishima, el agujero negro-Mishima, entré al mundo del “lacio” erotismo japonés.
Mientras los avances científicos redefinen los límites de lo posible, el negacionismo científico crece como un fenómeno preocupante.
Capítulo del libro: ‘Rusia: el regreso de la potencia’, de David Teurtrie (Hypermedia, 2024).
¿Qué sucedió realmente el sábado 10 de octubre de 1868, una fecha clave en la historia cubana?
“Es indudable el estrecho vínculo de la Alianza Francesa de Cuba con el comisariado cultural del patio, unidos en la pretensión de exportar una fachada de “normalidad” de la vida cultural del país“.
Fefita me esperaba en el solar y éramos felices. Cuando nos cansábamos de templar, entonces le hablaba de literatura. Nunca se había leído un libro. Todo le parecía aburrido, demasiado lindo y falso.
Ana Varela Tafur (Perú, 1963). Poeta, docente y activista cultural. Ha publicado, entre otros títulos, ‘Lo que no veo en visiones’ (1992), ‘Voces desde la orilla’ (2000), ‘Dama en el escenario’ (2001) y ‘Estancias de Emilia Tangoa’ (2022).
El Comandante agotó varios habanos. Dejó que Inocencio mirara sin interrumpirlo. Se mantuvo en silencio junto a Cueto. Hasta que comenzó a amanecer. Para esa hora, Inocencio había terminado de mirar.
Los amigos de la Rusia de Putin —Venezuela, Nicaragua, Cuba, Bolivia, Honduras, Corea del Norte, Tayikistán, Uzbekistán— fueron los primeros en felicitar al líder de 71 años que fue “reelegido” para un quinto mandato.
Víctor Varela (La Habana, Cuba). Dramaturgo, ensayista, escritor y artista visual. Creador de Teatro Obstáculo y de su concepto actoral. Vive exiliado en New York.
‘Borracho como una Cuba’ es una entrega de la serie ‘Epizootia’, una columna de la artista Camila Ramírez Lobón en ‘Hypermedia Magazine’.
El mitin de Trump en Ohio se enmarca en una dura retórica sobre los inmigrantes y controvertidas advertencias electorales.
Putin aprovechó el éxodo tras la movilización militar de 2022 para enviar espías a la Unión Europea, informa The Wall Street Journal.
Las tensiones aumentan en Estados Unidos a medida que los nuevos inmigrantes obtienen permisos de trabajo y los residentes de larga duración, algunos de los cuales llevan décadas esperando, se sienten ignorados.
Gaza se enfrenta a una grave crisis humanitaria tras el alto el fuego, con 2 millones de personas luchando entre ruinas, escasez y desplazamientos a pesar de la afluencia de ayuda.
Nada en Cuba o relacionado con Cuba puede existir sin un trasfondo o influencia político. Y eso es lo que los políticos han querido y logrado.
No meterse en política no es una opción. Lo apolítico es político. Uno postea: en la Calle Damas, entre San Isidro y la Avenida del Puerto, hay una decena de personas acuarteladas en la casa #955, sede del Movimiento San Isidro y vivienda del artista Luis Manuel Otero Alcántara. La gente prefiere mirar hacia otro lado.
La fotógrafa Ingeborg Portales rinde homenaje a la actriz Broselianda Hernández (1964 – 2020), quien falleciera ayer en la ciudad de Miami.
Una entrevista al diseñador gráfico Rolando Pulido, autor de La Tiñosidad.
¿Quiénes miran? ¿Qué se mira? La siguiente lista esboza uno de tantos posibles itinerarios que pudieran seguirse a través de las películas programadas en el 43º Festival de Cine de La Habana.
Ha muerto una persona en una de mis películas, no lo puedo creer. Su rostro estará conmigo mañana en el rodaje, y en la edición, y en la película por siempre.
“Muchos cubanos de línea dura pueden pensar que Ignacio Berroa regresó a Cuba a tocarle a Castro. Pero para mí fue un regreso victorioso: poder regresar a mi país a tocar la música que siempre quise tocar, y darles la oportunidad de verme tocar a esos jóvenes que tanto me admiran, para que supieran que sí se puede”.