Llama la atención que los académicos afroestadounidenses, defensores de los derechos civiles y de las minorías en su país, no pregunten por los presos políticos o los derechos humanos en Cuba.

Llama la atención que los académicos afroestadounidenses, defensores de los derechos civiles y de las minorías en su país, no pregunten por los presos políticos o los derechos humanos en Cuba.
“Interesa, sobre todo, fijar la imagen de ese joven poeta iconoclasta que aprovecha todas las oportunidades para hacerse visible y se mueve con libertad entre ‘los pajes, los comunistas y los sultanes’”.
Nikki Haley gana las primarias de Washington D.C., marcando su primera victoria en la carrera por la nominación del Partido Republicano contra Trump.
La cultura oficialista cubana ha servido como
“Somos cada vez más analfabetos funcionales respecto a la realidad. Cada vez más estériles emocionales e incultos de cualquier cosa humana”.
Cuando conocí a Reinaldo García Ramos (Cienfuegos, 1944 – Miami, 2024), era yo un joven ávido de sabiduría y él un hombre “abrumado de virtudes”.
Me preguntan qué puedo aconsejar a los jóvenes que quieren ser escritores. Siempre doy la misma respuesta: si pueden dedicar su vida a otra cosa es mejor que se olviden de la escritura.
El yo de cualquier artista sólo resulta interesante cuando nos propone una relación incómoda con la realidad.
Para los extranjeros, Cuba aún sigue siendo la isla de Fidel Castro. La autora ha optado por no explicarles demasiado. Con tal de no matarles la ilusión.
Dos veces conocí en persona a Gabriel García Márquez.
Él entraba y salía como “Gabo por su casa” de la Isla de la Libertad, donde año tras año a muchos nos negaban sin explicación el Permiso de Salida para viajar al exterior.
‘Empresas’ es una entrega de la serie ‘Cosa seria’, una columna de opinión del artista Omar Santana, en ‘Hypermedia Magazine’.
No hay alivio en la voz del revolucionario o fidelista; sin embargo, el llanto de las caderas es siempre liberador bajo la voz sazonada del choco-reparto.
Liu Santiesteban (La Habana, 1977) es activista por los derechos humanos en Cuba, influencer y emprendedora. Junto a Ana Olema conduce “Juntas y Revueltas”, programa de YouTube que denuncia al régimen cubano y aboga por la libertad de los presos políticos.
Esta acción forma parte del acuerdo migratorio Movilidad Segura, que el gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador aceptó.
La mayoría de la disidencia cubana, ahora refuncionalizada como youtubers, se alía a lo más conservador en cuanto a políticas para con la Isla. Actúa por campañitas (Cero Remesas, Operación Retorno) , con lo cual consiguen animar a la fanaticada de base y mover el posicionamiento de los livestream channels, pero nada más allá.
“En la enseñanza musical no se estudiaba jazz. A mi generación lo que le interesaba era el rock. La política era meterte la música cubana a la fuerza. Hubo una época de reevaluación del son: son para aquí, son para allá. Por eso lo rechazábamos. Solo después, fuera de Cuba, es que redescubro la música cubana”.