“Hay un horror arcaico en esta sed de sangre que ya no creía posible en estos tiempos. Esta masacre tiene el patrón de la aniquilación mediante pogromos, un patrón que los judíos conocen desde hace siglos”.

“Hay un horror arcaico en esta sed de sangre que ya no creía posible en estos tiempos. Esta masacre tiene el patrón de la aniquilación mediante pogromos, un patrón que los judíos conocen desde hace siglos”.
El aumento de los cruces ilegales por la frontera sur desafía las políticas estadounidenses, mientras el Congreso y la Casa Blanca estudian importantes límites al asilo.
Ángel Delgado es autor de uno de los performances de arte político más extremos en la historia del proceso post 1959 en Cuba.
“No había ningún motivo para charlar con Leonardo Padura y los había todos. No tenía ningún libro que promocionar, y por eso hablamos a pierna suelta de casi todo”.
Un testimonio de la política cultural española al final del periodo socialista.
“El Ministerio de Cultura le invita a uno, por primera vez en veinte años, a un viaje al extranjero, a Cuba en este caso. El escalafón se mueve. Esto es el éxito”.
El bollo ʻrealistaʼ de una modelo real o el bollo ʻidealʼ del pintor.
¿Cómo hubiera sido esta Isla sin ese desvío impuesto por un experimento demencial?
Los submarinos de la clase Yasen-M son los más avanzados de Rusia, con tecnología punta, misiles hipersónicos y excepcionales capacidades de ocultación.
Haikus de 140 caracteres, pero con más profundidad que un Twitter. Un libro con sentencias tecnológicas que bien pueden ser producto de la realidad cubana de cierto tiempo pero que también pueden ser resultado de una distopía ‘cyberpunk’ futurista.
Lezama Lima visto por el Estado cubano: “autor de procedencia católica, de extracción pequeño-burguesa y plenamente definido como enemigo ideológico de la Revolución”.
Hacer con poliespuma una réplica de la isla (una réplica que mida 10 metros de largo) y llevarla, por todo el Paseo del Prado, hasta el malecón y arrojarla al mar. La isla se arroja a sí misma a la bahía. Y flota a la deriva.
Un Lezama Lima “inmovilizado y perplejo”, al borde de la depresión, el desespero, el pavor: un imposible posible que no alumbrará ‘potens’ alguno, solo dolor y lontananza.
“Y no voy a permitir ni una ofensa, ni opiniones de nadie, porque nadie sabe los problemas de nadie, por lo que le digo q por favor no traiga más a su compañera aquí a mi casa.”
En el centro de la cuestión hay una pregunta fundamental: ¿Cómo es posible que Israel, una nación conocida por su destreza en materia de inteligencia, fuera cogida por sorpresa?
Ser un cineasta político o escandaloso no es ninguna vergüenza para un intelectual. Pero sería tonto considerar que ‘Santa y Andrés’ pudiera avanzar por el mundo sin el manto gris de la censura, que asusta y a la vez te muestra quienes son tus amigos en las malas, en lugar de esos cómplices puntuales que están ahí cuando las cosas marchan.
En el año 2006 tuve la dicha de poder conversar con Cándido Camero (1918 – 2020) a raíz del documental que sobre él realizara el cineasta Iván Acosta: Cándido manos de fuego. Digo dicha, y digo suerte, porque conversar con Cándido fue descubrir la verdadera grandeza de este genio de la música cubana, más allá de sus palabras.