¿Qué rescato ahora de esa prehistoria? Unos cuantos libros, como siempre.
¿Qué rescato ahora de esa prehistoria? Unos cuantos libros, como siempre.
Los datos que se esperan del análisis están destinados a probar la teoría que sugiere que los asteroides trajeron los primeros fragmentos de vida a la Tierra.
¿Te vas? ¿Otra vez te vas? ¿Y hasta cuándo? —ella interroga, pero el hombre la mira y no responde. La mira y no la besa…
No pudo ser mejor. Él era mi Humbert Humbert. Y yo, su Lolita. Treinta y tres años contra catorce.
Es la Uneac, la organización que acompaña proyectos que coartan la libertad creativa, la que atropella a mujeres intelectuales; la que ideologiza y politiza el consumo culturaly educativo de las niñas y los niños cubanos.
No hay eventos a los que acudir: ni tertulias, ni festivales, ni espacios de opinión donde se pueda debatir qué se debería hacer con las estatuas, una vez que el sistema se desplome.
La atención a la migración cubana es una deuda de solidaridad que la región aún no ha saldado.
Yo también juré convertirme en justicia, también escribí al MINSAP, a la Fiscalía, agoté todas las instancias del escarnio que la burocracia te reserva cuando hay una negligencia médica y tú reclamas. También quise saber la verdad, encontrar sentido, restaurar el orden. Pero no pude.
La Revolución se instituye como la instancia legitimante que incluye excluyendo. La única pareja de baile es ella misma y no bailar con la Revolución no es una opción.
Si a veces cuesta dialogar al interior de la familia, ¿por qué resolvemos tan fácilmente una guerra entre dos países, tan pronto como nos enteramos por las noticias?
Mis ojos se llenaron de lágrimas. Lloré con más fuerza, con desesperación y rabia: “Cálmate, todo terminó. Te puedes ir”.
Dibujos, infinidad de collages recreando escenas, esculturas laboriosas: un espacio de acción vivida que le permite repasar episodios atrapados en su memoria.
Un devastador terremoto de magnitud 6,8 sacudió Marruecos, causando más de 600 muertos, centenares de heridos y cuantiosos daños en el centro histórico de Marrakech, lo que supone el temblor más fuerte del país en un siglo.
“El arte, tal y como lo conocíamos, es suplantado por la dictadura del mercado del arte. Ya ningún artista de notoriedad actúa sin tener presente las fuerzas del mercado. Estas fuerzas económicas son demarcadas por una nueva y extraña danza de reglas no escritas entre la intolerancia de la derecha y la inconsecuencia del liberalismo”.