El ministro de Asuntos Exteriores de Costa Rica, Arnoldo André Tinoco, expresa su preocupación por la influencia Irán, Rusia y China en Venezuela, Nicaragua y Cuba.

El ministro de Asuntos Exteriores de Costa Rica, Arnoldo André Tinoco, expresa su preocupación por la influencia Irán, Rusia y China en Venezuela, Nicaragua y Cuba.
Y así vamos más desunidos, más esclavos del ego, más especuladores, más indolentes, más sombras y menos luces.
Un ataque con drones sacude el centro de Moscú y los escombros caen sobre el Centro de Exposiciones de la ciudad. Rusia culpa a Ucrania. No hay víctimas.
Ante mis ojos la imagen se imponía. Debo capturarla, pensé y saqué el móvil con cautela de mi bolso, para que el señor no se diera cuenta de que sería fotografiado.
El alivio de Ucrania por poder luchar para vivir un día más también se mezcla con la inquietud por la futura ayuda de Estados Unidos.
La ley SB4 de Texas desata el miedo, ya que permite una dura aplicación de la ley de inmigración dirigida por el Estado, con la posibilidad de separar familias.
Kirenia Carbonell (La Canela, Holguín, Cuba, 1982) es activista, directora de Relaciones Públicas y fundadora de la Coalición Cubanocanadiense.
El Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente del Caribe Isla Verde suma otro ensayo en la cruzada por la recuperación de capital simbólico de la casta política en el poder, facilitado por la complicidad de organismos y organizaciones internacionales.
La escritora cubanoamericana, graduada de Harvard, desata la polémica por sus controvertidas opiniones sobre el matrimonio.
“Las películas son aromas que persisten vaga o intensamente, hasta desvanecerse. En vez de memorizarlas, busco hablar de su recuerdo, de lo que no pude tocar en ellas, de cómo me conquistaron y eludieron”.
En medio de un panorama tan baldío como el que vivimos, a la sombra de una pandemia y un contexto que proyecta un porvenir titilante, de incertidumbres, Adonis Ferro incita a recordarnos como perdedores.
El reciente Decreto-Ley 35 de 2021 no solo limita la libertad de expresión de los cubanos en redes sociales y cuanto ámbito cibernético exista; blinda, además, de forma monárquica, a los dirigentes de ese despropósito que llaman Revolución.
“Comencé a escribir para conjurar algo a lo que no sabía cómo dirigirme”.
El filin sigue siendo un patrimonio reverenciado, pero muy distante de la publicidad del son edulcorante, la nueva trova política, y otras insignias del socialismo musical.