En las costas donde se siembra el mangle rojo, / no hay agua dulce. / Cada vez que llega el agua dulce, en una barcaza,/ hay una fiesta.
En las costas donde se siembra el mangle rojo, / no hay agua dulce. / Cada vez que llega el agua dulce, en una barcaza,/ hay una fiesta.
Annette Bening protagoniza ‘Nyad’, un biopic de Netflix que celebra la tenacidad de Diana Nyad, que nadó de Cuba a Florida a los 60 años.
Fernando Almeyda (La Habana, 1992) es abogado y activista por los derechos humanos. Vive expatriado en Serbia.
“Es el territorio del zahorí. Hace muchos años yo quise formar parte de ese mundo y me entregaron un péndulo”.
“No estamos aquí para hacer un estudio general de la prostitución intelectual; sino para denunciar la represión”.
El Confidencial: “La buena y la mala suerte siguen contando más en nuestras desgracias que los —a menudo— ilusorios sistemas de prevención”.
Gaztelu, el llamado “cura de Orígenes”, que había tenido numerosos contactos con los ‘barbudos’, era de los que apostaban por mantener el apoyo al gobierno revolucionario.
¿Por qué, a pesar de la popularidad de algunas de sus narrativas, Rusia ha fracasado en su guerra informativa contra Occidente?
“Cuba se ha plegado excepcionalmente a los designios del Kremlin, en busca de un socio clientelista de mayor peso financiero ante la crisis multifactorial que padece”.
Cuando el autor de estas líneas continúa reuniendo notas dispares sobre literatura cubana (de cualquier procedencia, fecha o condición), es porque en realidad todo lo que existió un día es, ahora mismo, el presente, y el presente contiene, forzosamente, todo lo que vendrá.
¿Cómo un país que se ha preciado de poseer cifras oficiales de educación formal elevadas ha podido generar líderes con actitudes públicas y privadas tan lamentables, que se reflejan en los resultados de su pobre accionar gubernamental?
“Cuba es un gran limbo, un no lugar. Una especie de zona franca donde las leyes físicas funcionan con otra dinámica. Una anomalía”.
‘Ulises’, como ya se ha dicho, es el laberinto de una ciudad, una mente y un corazón. El laberinto de una persona que ama. Y es, además, Molly Bloom: la mujer que dice, al final de la obra: “sí quiero sí”.
Vernos ella y yo sigue siendo (aunque haya dejado de serlo, porque logramos vernos en Madrid) imposible. Una imposibilidad que dejó de ser lezamiana para ser, como cualquier palabra, solo lo que significa.
El arte cubano está fragmentado y disperso por el mundo, igual que casi todas las familias.
¿Qué sobrevive hoy? Una cadena de pandillas, escuelitas, metecabezas, soñadores, viciosos, teloneros, herméticos, simuladores, nuevos ricos, escépticos, jubilados y repatriados que intentan reinventarse en el arte y en la vida.