“Nos une el hecho simple de convivir en una isla quimérica, desolada, donde reinan el agobio, el utopismo cínico, la violencia, la ocultación y la orfandad espiritual”.
“Nos une el hecho simple de convivir en una isla quimérica, desolada, donde reinan el agobio, el utopismo cínico, la violencia, la ocultación y la orfandad espiritual”.
Un género en el que confluyen diferentes campos de la ciencia ficción, el horror sobrenatural, la crítica social y política, la comedia y hasta el erotismo.
Lloró y lloró hasta formar un charco en su parte de la mesa. De no haberlo visto, jamás habría creído que alguien pudiera soltar tantas lágrimas.
“Me autodenomino como una artista transdisciplinaria, porque con lo que hago, intento que atraviese las fronteras de lo uno o lo otro. Hago converger el videoarte, la fotografía, las instalaciones, la escritura, el teatro y lo performativo, pero no hay una barrera”.
Los amigos de la Rusia de Putin —Venezuela, Nicaragua, Cuba, Bolivia, Honduras, Corea del Norte, Tayikistán, Uzbekistán— fueron los primeros en felicitar al líder de 71 años que fue “reelegido” para un quinto mandato.
Víctor Varela (La Habana, Cuba). Dramaturgo, ensayista, escritor y artista visual. Creador de Teatro Obstáculo y de su concepto actoral. Vive exiliado en New York.
‘Borracho como una Cuba’ es una entrega de la serie ‘Epizootia’, una columna de la artista Camila Ramírez Lobón en ‘Hypermedia Magazine’.
El mitin de Trump en Ohio se enmarca en una dura retórica sobre los inmigrantes y controvertidas advertencias electorales.
La expedición Guanabá partió de La Habana hacia Guanahacabibes el 31 de agosto de 2023, con el objetivo de monitorear los nacimientos de tortugas verdes, en el extremo oeste del archipiélago cubano.
El miedo es una constante en todas las artes, pero en cuestiones de taxonomías fílmicas pop, es comúnmente reducido al susto, al horror y al terror. El espectro de esta omnipresente fuerza, suprasocial y suprahumana, se limita al temor a lo desconocido, a lo anormal o distinto, a lo agresivo. Esta lista va más allá.
El gesto de Jorge Pantoja remeda, punto por punto, a ese que Carpentier propuso a los lectores habaneros casi un siglo atrás, cuando la ciudad comenzaba a ser aquello que ahora ha dejado de ser. Pantoja sale a ver su ciudad con otros ojos, buscando hacerle decir a lo cotidiano y ordinario, a lo que estuvo allí desde siempre, otra cosa, algo nuevo.
“En una sociedad como la actual, donde cada vez hay más tendencia a pensar las cosas de manera maniquea, en blanco y negro, el arte juega un papel importante porque es un refugio donde puedes convivir con un mundo lleno de matices, y cambiar esa percepción radical de las cosas”.
Aunque la censura siempre ha tenido mano dura, no deja de producirse una sorpresa cuando posa garras en terreno seguro. Es decir: un terreno ya sesgado para un propósito, que puede ser el arte y su libertad, o al menos la libertad de la nómina de sus artistas. Un terreno preparado para cualquier tipo de incidentes, que a su vez quiere decir “curado de espanto”.