Cómo la URSS recurrió al comercio en la sombra y al espionaje industrial para eludir las sanciones occidentales.
Cómo la URSS recurrió al comercio en la sombra y al espionaje industrial para eludir las sanciones occidentales.
Llevaba a la cintura una pistola y un cuchillo comando y en el resto del cuerpo las cicatrices de tres balazos.
Pero su expansión global, la resistencia que pueda encontrar o la posibilidad de que inspire una contrarrevolución ya no dependen de él.
Lo que llamamos ‘pasado’ son nuestros recuerdos. Lo que llamamos ‘futuro’ son nuestros deseos.
Un lugar adonde nadie haya escuchado nunca hablar de Fidel, Revolución, trabajo voluntario, Período Especial, reordenamiento monetario.
En Cuba, la noción de canasta básica alimentaria (CBA) no es técnica: es una disputa política y epistemológica.
‘Vivir en junio con la lengua afuera’, revisa el título de un poema de Reinaldo Arenas, sustituyendo el verbo “morir”, por una insistencia en “vivir”.
Un dibujo gestacional que no viene del útero, sino del alma.
Conversamos con Cristina María Rodríguez Pentón, pastora evangélica y presidenta del Ministerio Mujer a Mujer, una de las voces más firmes contra la opresión del régimen.
“Hay un horror arcaico en esta sed de sangre que ya no creía posible en estos tiempos. Esta masacre tiene el patrón de la aniquilación mediante pogromos, un patrón que los judíos conocen desde hace siglos”.
Tu erudición sin ética la enterraremos contigo: entérate a tiempo, Silvio, ahora que ya casi te estás yendo y sin pedirnos perdón.
La insólita contribución que el barrio de la ficción puede hacer a la memoria colectiva de la Isla sin rebajarse a los clichés habituales.
“No pierdo la calma. Encontraré una de las nueve puertas. Luego, la estación. Luego, cuando llegue a Orte, el próximo tren. Y cuando ya esté en Assisi, la basílica”.
Reuters: “El expresidente ruso Dmitri Medvédev dijo que Rusia debería trabajar por la ‘desaparición’ tanto de Ucrania como de la alianza militar”.
“Me siento en un parque. Soy como el personaje de la película de Wim Wenders, el japonés limpiador de baños”.
“Aferrados a la vida, los paisajes citadinos de Izuky Pérez Hernández revelan un silencio aparente que no la representa a ella, ni a sus moradores.
Las tropas rusas intensifican sus ataques en el este de Ucrania, apuntando a Chasiv Yar, mientras las defensas aéreas de Kiev se debilitan en medio del estancamiento de la ayuda de Estados Unidos.
CNN informa de que una carpeta que contenía información en bruto sobre Rusia desapareció de la Casa Blanca durante los últimos días de Trump.
A pesar de la presión internacional, las autoridades israelíes siguen resueltas en su misión de neutralizar a Hamás, en represalia por el atentado del 7 de octubre.
¿Quién no ha sido víctima de una pasión insana? La persona que no ha pasado por esto, que lance la primera piedra.
El 27 de noviembre de 2020 más de trescientos intelectuales, artistas y periodistas acudimos al Ministerio de Cultura para exigir el reconocimiento de nuestras libertades y derechos ciudadanos; y para expresar el rechazo a la violencia de Estado, sostenida por años e incrementada en los últimos meses.
Esa cubanía que honrosamente cargamos, que involucra valores, ideas, emociones, actitudes, aún arrastra la pesada carga de una nacionalidad que la opaca, la reduce y la deshonra. Una carga que, independientemente de nuestra voluntad, revela las insufribles paradojas de la cubanía.
Coincidí con Raúl Hernández el día que adoptó el nombre de Raulito Bazuk, y el día que su madre y él nombraron su restaurante: Grados. Esta conversación para Hypermedia Magazine comenzó en febrero y la terminamos por estos días de cuarentena. Pese al cierre de todos los restaurantes del país a causa de la pandemia, Bazuk es optimista.
Nunca he querido marcharme de Holguín: desde aquí puedo materializar todos mis sueños y ser un hombre feliz.
Para cada tema pienso seleccionar un artista, este seleccionaría a otro y así sucesivamente; sin procurar una cadena de invitaciones interminable. Creo que la práctica misma pondrá el ‘stop’, ya veremos cómo va saliendo eso.
Vicenta es una mujer que no levanta la voz. Habla pausada. Con cierto dolor. Un amigo que no sabe nada de Cuba y que ve quince minutos del montaje me dice: “Vicenta es esa voz que la gente con poder no quiere escuchar”.