Sería en esa perspicacia, en ese olfato de perro pavloviano, donde único se conserva la cubanía, si es que aún existe esa glándula.

Sería en esa perspicacia, en ese olfato de perro pavloviano, donde único se conserva la cubanía, si es que aún existe esa glándula.
Biden anuncia más de 500 nuevas sanciones contra Rusia, dirigidas a su economía, industria de defensa y entidades de apoyo.
Ahí, donde reina un individualismo que pone en segundo lugar cualquier otro valor, el único aspecto donde pareciera reinar lo colectivo es en aquella área que debía ser precisamente la más individual e íntima: la vida sexual.
El ODC denuncia la manipulación y el lavado de significado de los Derechos Humanos en Cuba.
Para nosotros, el mar es la ruta de una esperanzada desesperanza.
En el corto-medio plazo, Venezuela será libre o será totalitaria a nivel castrista. Occidente debe apostarlo todo a la primera opción.
“Cuando llegué a Miami hace un año, me vi flotando. No tenía casa, no tenía documentos, no tenía trabajo, no tenía dinero, no tenía amor y no tenía país”.
Yo era Elena en ‘Corazón azul’. Me encontraba ante las ruinas de una isla. Por fin dejé de matarme. Ya no podría volver a interpretar a Ofelia.
Con su técnica excelente y su goce singular de pianista acuariana, Diana Carbonell Avtodiychuk genera una danza con sus dedos.
Hablo desde un lugar que, de no ser porque me aseguraron que íbamos a estar bien, diría que es lo más parecido a una tumba.
Lloró y lloró hasta formar un charco en su parte de la mesa. De no haberlo visto, jamás habría creído que alguien pudiera soltar tantas lágrimas.
Una entrevista que no encaja con la imagen del poeta asediado por inquietudes proféticas o atento a las hazañas de la creciente oposición a Fulgencio Batista.
Hay rumores de que se conserva allí dentro el cerebro de Fidel Castro, que está bajo tierra y que un elevador secreto desciende a través de varios metros de hormigón.
Mírenlo. Fue (o debió ser) el tío cheo de cualquiera de nosotros, los sobremurientes del siglo XXI.
Trump planea una drástica reforma migratoria para 2025, que incluye deportaciones masivas y grandes campos de detención.
Alguien podría decir: he aquí una más de los que quieren hacerse un nombre a costa de nombrar a los que ya se han ganado el suyo. Pero se equivocan. Nosotros no queremos un nombre: los queremos todos y al mismo tiempo. Queremos ver arder el Kempinski como vimos arder Notre Dame. Somos las hijas putas que parió la mujer del carpintero.
“Estoy orgulloso de mi generación: están revolucionando la historia. Tenemos mucho que perder, pero tenemos muchísimo más por ganar. Por eso el miedo a expresarse libremente es cada vez menor. El arte tiene un papel protagónico en un cambio social nunca visto en más de sesenta años”.