Dejar solo el templo en los días de fiesta es desertar de las banderas de la patria; y ¡de la patria puede tal vez desertarse, mas nunca en su desventura!
Dejar solo el templo en los días de fiesta es desertar de las banderas de la patria; y ¡de la patria puede tal vez desertarse, mas nunca en su desventura!
La policía ecuatoriana irrumpió a última hora del viernes en la embajada de México en Quito y sacó a un ex vicepresidente que había solicitado asilo.
También se ofrecen ‘El gran Gatsby’ de Scott Fitzgerald, ‘El maravilloso mago’ de Oz de L Frank Baum y ‘Cuento de Navidad’ de Dickens.
El ODC alerta sobre las complicidades tácticas que están dispuestos a llevar adelante determinados agentes de influencia que instrumentan el arte para encubrir las demandas de una mayoría silente.
Y yo, bueno, yo lo sabía todo sobre ‘One Piece’.
Algunos más parecen pujar como parturientas que gruñir y resoplar como todo buen quemador que se respete.
Las conexiones entre la ciencia ficción y la ciencia son múltiples. La literatura y el cine adelantaron descubrimientos que cambiaron la humanidad.
Todos los caminos conducen a Cuba. Todo es lo mismo, aunque tenga mejor maquillaje.
La ironía es que, en el fondo, él ama ese país como muy pocos de su generación lo aman. Estoy seguro.
Vergüenza, inconformidad, culpa, miedo, son algunas de las emociones que se generan en el sujeto preso.
El asunto aquí es la desaparición muy conveniente, para el gobierno de Miguel Díaz-Canel, de casi 9000 fallecidos cubanos.
Las cárceles, llenas de cubanos: hijos, hermanos y padres. Las calles vacías, y muerte en el mar y en la frontera.
Todo parece indicar que el primer fallecido por SIDA en Cuba no fue un coreógrafo, como afirmó el noticiero. En su lugar, había muerto un militar que enfermó en África.
Esa es la singularidad cubana. Sin libertad no habrá prosperidad en Cuba, aunque se invirtieran todos los recursos de la diáspora en la Isla.
Lewiston, Maine, conmocionado tras un trágico tiroteo que deja 16 muertos y decenas de heridos. Las autoridades inician una persecución del sospechoso, Robert Card.
“Mi obra es un quehacer híbrido entre las prácticas de archivo, la memoria y la estética. Y aquí entramos en el plano del arte político, pues siempre que cuestionas las escrituras del poder y les añades un apéndice, haces notar la vulnerabilidad de la narración en sí, por lo que estás generando discrepancias políticas”.