Zelenski reveló que lee libros sobre la historia del siglo XX, que exploran las “mentalidades” de figuras de la Guerra Fría y las relaciones entre las dos superpotencias, más Cuba.
Zelenski reveló que lee libros sobre la historia del siglo XX, que exploran las “mentalidades” de figuras de la Guerra Fría y las relaciones entre las dos superpotencias, más Cuba.
Aquí pertenezco, a pesar de la época espantosa que estamos pasando, pero eso no es Cuba.
El programa de parole humanitario de la administración Biden para cubanos, nicaragüenses, haitianos y venezolanos se enfrenta a un recurso judicial en Texas que podría afectar a decenas de miles de personas.
Cuba se encuentra en una emergencia energética y alimentaria. A pesar de la gravedad de la situación, la comunidad internacional deja a la isla, como de costumbre, en un segundo plano.
Un grupo de expertos vinculado al Kremlin propone una explosión nuclear “demostrativa” para disuadir a Occidente de armar a Ucrania.
Las sanciones occidentales han dado lugar a una economía sumergida mundial, en la que China ocupa un lugar central, comerciando con productos sancionados y socavando los esfuerzos de Estados Unidos.
Europa está en alerta máxima tras una serie de presuntos atentados y de sabotajes vinculados a Moscú, que hacen temer intentos rusos de desestabilizar el continente.
La frontera con Egipto en el extremo sur era la única frontera terrestre de la Franja de Gaza que Israel no controlaba directamente.
Uno vive donde vive: en el páramo. No en el de esa fastuosa y lúgubre (pero refulgente) novela titulada ‘Wuthering Heights’. Y voy a ver quién pinga me acusa de malinchismo.
¿Se podría justificar la comparación de la Cuba actual con la Polonia de la época de la transformación de los años noventa del siglo XX?
El viento de la independencia del yo sopla en direcciones disímiles. ‘Jardín’ cumple 70 años ahora, en medio de la libertad mancillada, la represión del espíritu, o la “patologización” de los “sujetos altripensantes”, actos que en verdad devienen síntomas irrebatibles de la muerte de la Utopía.
“Muchos cubanos de línea dura pueden pensar que Ignacio Berroa regresó a Cuba a tocarle a Castro. Pero para mí fue un regreso victorioso: poder regresar a mi país a tocar la música que siempre quise tocar, y darles la oportunidad de verme tocar a esos jóvenes que tanto me admiran, para que supieran que sí se puede”.
Yo nunca he publicado un libro en Cuba. Pero me pregunto si existe mucha diferencia entre publicar y no publicar allá. Nunca he visto una edición cubana en otra librería que no sea en una librería de Cuba. Esto no es una crítica. Quizás me gusta la idea de un libro que solo puedo encontrar en un lugar determinado.
Siempre están esos golpetazos taladrando la memoria. De algún modo, una siempre está pensando en el abuso. “Supervivencia abusiva”, puede llamarse el capítulo de esta historia pública y privada de La Habana, 2021, donde los rostros muestran su parecido torturado, una semejanza única que ninguna mascarilla encubrirá.