El primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, ha declarado que Cuba puede convertirse en una puerta de entrada para Bielorrusia en la región latinoamericana. Esta declaración se produjo durante su reunión con la Sociedad Bielorrusa de Amistad y Vínculos Culturales con Países Extranjeros y la sociedad Bielorruso-Cubana, según informó la agencia de noticias Belta.
Marrero Cruz destacó las sólidas conexiones de Cuba con todas las naciones latinoamericanas y caribeñas, sugiriendo que estas relaciones podrían proporcionar a Bielorrusia una oportunidad única para comprometerse más profundamente con la región. Identificó varias áreas potenciales de colaboración entre Cuba y Bielorrusia, incluyendo la agricultura, la biotecnología y los productos farmacéuticos. Destacando el potencial de crecimiento en estos sectores, Marrero Cruz señaló la necesidad de interacción entre las instituciones bancarias de ambos países.
El turismo es otra área de interés mutuo. Marrero Cruz destacó el creciente número de turistas bielorrusos que visitan Cuba, con más de 6000 sólo en el año en curso. Se están realizando esfuerzos para facilitar este crecimiento, incluida la organización de vuelos directos desde Minsk a La Habana.
El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, se hizo eco de estos sentimientos en su reunión con Marrero Cruz. Subrayó la importancia de alinear el nivel de cooperación económica con las relaciones políticas y humanitarias existentes. Vyacheslav Danilovich, rector de la Academia de Gestión del Presidente de Bielorrusia, comentó además el potencial de esta dirección cubana, señalando los puntos en común geopolíticos e ideológicos entre ambas naciones. Hizo hincapié en el papel de una sólida base económica para sostener esta relación bilateral.
Como muestra de esta floreciente relación, la delegación cubana encabezada por el primer ministro Marrero Cruz visitó la Fábrica de Tractores de Minsk. Evaluaron los modelos de tractores bielorrusos y discutieron las perspectivas de ensamblar estas máquinas en Cuba. Los tractores bielorrusos tienen una larga historia en el mercado cubano, con una presencia significativa desde la fundación de la Fábrica de Tractores de Minsk.
La visita, que incluyó reuniones con el presidente bielorruso Lukashenko, el primer ministro Roman Golovchenko y otros funcionarios de alto nivel, supone un paso adelante en la cooperación entre Bielorrusia y Cuba. Destaca la visión compartida de ambas naciones en el desarrollo de fuertes lazos económicos y un entendimiento mutuo de sus respectivas posiciones geopolíticas. Esta asociación podría reforzar la presencia de Bielorrusia en América Latina y la de Cuba en Europa.
