El Pentágono confirmó que aviones de guerra estadounidenses atacaron a agentes iraníes en Siria. La operación, ordenada por el presidente Biden, fue en respuesta a una serie de ataques contra las fuerzas estadounidenses en la región.
El secretario de Defensa, Lloyd Austin, declaró que los ataques aéreos, ejecutados a última hora del domingo, tenían como objetivo instalaciones utilizadas por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC) y sus grupos afiliados. Entre ellas figuraban un campo de entrenamiento cerca de Bukamal y un piso franco cerca de Mayadin. La medida forma parte de la estrategia de la administración Biden para disuadir de una agresión al personal estadounidense sin desencadenar un conflicto más amplio.
Bajas y estrategia militar
Un alto funcionario de defensa estadounidense reveló que el sitio de Bukamal también sirvió como depósito de armas. El piso franco de Mayadin funcionaba como cuartel general de las milicias afiliadas al IRGC. El Pentágono cree que los ataques causaron varias víctimas entre el personal de las milicias, lo que supone un golpe directo a la influencia de Teherán en la región.
Los ataques aéreos son los últimos de una serie de operaciones estadounidenses contra instalaciones vinculadas a Irán en Siria. La región ha sido testigo de un repunte de la violencia contra las tropas estadounidenses, con al menos 46 ataques documentados desde mediados de octubre. Este aumento de la hostilidad se produce en medio de las crecientes tensiones tras la reciente guerra en Gaza, donde Hamás, apoyado por Irán, llevó a cabo ataques transfronterizos.
Presencia de tropas estadounidenses en la región
Actualmente hay unos 2500 soldados estadounidenses estacionados en Irak y 900 en Siria, principalmente para impedir el resurgimiento del Estado Islámico. Estas fuerzas se enfrentan cada vez más a las amenazas de aviones no tripulados y cohetes, a menudo atribuidas a grupos apoyados por Irán.
Aunque la administración Biden se ha enfrentado a críticas por su respuesta a la agresión iraní, la secretaria Austin, en una declaración reciente, afirmó el compromiso de Estados Unidos de proteger a su personal. Hizo hincapié en que Estados Unidos atacaría en el momento y lugar de su elección y que los ataques contra las fuerzas estadounidenses debían cesar.
