El evangelio de un béisbol que es patrimonio de nuestra nación desaparecida.

El evangelio de un béisbol que es patrimonio de nuestra nación desaparecida.
En el 93 tenía 11 años. En ese tiempo mi mamá era el sostén de la casa. No le he agradecido lo suficiente a esa mujer divorciada, profesora de matemáticas con un salario de trescientos pesos que fue mi madre en los 90.
Estos son los momentos maravillosos que después desaparecen, sin dejar ni trazas, en esa matemática maléfica que llamamos todavía, por inercia ideológica, ‘nuestra memoria nacional’.
Cientos de migrantes haitianos han llegado a Chiapas, el estado más meridional de México, desafiando los recursos locales.
Este perfil pretende desentrañar la compleja narrativa de una mujer que se ha convertido en símbolo tanto del sueño americano como de la naturaleza de la política estadounidense.
Hezbolá al borde de la guerra con Israel al expirar el ultimátum; el inminente discurso de Nasralá hace temer un nuevo conflicto en la zona.
En Estambul, cuerpos de especialistas dilucidan si es viral o bacteriano el arte cubano.
Desde Minnesota, el presidente abogó por una “pausa” humanitaria, subrayando la necesidad de garantizar la liberación de los rehenes en poder de Hamás.
Uno de los temas para el ensayo en el exilio es el análisis de la Revolución y su vínculo con la pasada República. Debiéramos preguntarnos qué se debatía en la ensayística de la República y si el fenómeno revolucionario y su degeneración autoritaria implica la pérdida o la superación de aquellos temas.
Cuando los grandes paquidermos gubernamentales se hayan hundido del todo, INSTAR (Instituto de Artivismo Hannah Arendt), del que Tania Bruguera es directora, cobrará relieve como uno de los principales centros de creación, activismo, pensamiento y comunicación en Cuba.
La acumulación, la selección, la jerarquización y la asignación de nuevos sentidos, resultan, sin duda alguna, acciones sobre las que se orquesta la operatoria estética contenida en el trabajo del artista Fausto Amundarain.
Ernesto Cardenal no era cardenal ni demasiado católico ni un carajo. Sólo en papeles era cura. Su relación más íntima con la Iglesia duró apenas medio minuto…