Las autocracias han aprendido a controlar el relato global: manipulan la información, moldean emociones y reescriben la verdad.
Las autocracias han aprendido a controlar el relato global: manipulan la información, moldean emociones y reescriben la verdad.
Incluso aquellos cineastas que han trabajado dentro de las pautas institucionales de la Revolución no están a salvo de que su trabajo sea despedazado.
Cuando el disenso se volvió sospechoso, cambió la reflexión por la certeza y la crítica por la pureza moral.
El ministro ucraniano de Asuntos Exteriores valora un plan de paz que podría poner fin a la guerra, centrado en la retirada de las fuerzas rusas.
“Las revoluciones contrarias a la naturaleza humana son difíciles y a menudo requieren el uso de la violencia”.
Cuarenta piezas, cinco continentes y una idea común: la belleza hecha utilidad. De Japón a Brasil, cada objeto revela cómo el diseño traduce la cultura en forma, materia y tiempo.
El ODC expone la paradoja de esta movilización diplomático-cultural que pretende representar a “todos los cubanos”, homogenizados bajo la horma ideológica del gobierno cubano.
El animalario de Jorge Camacho es el más amplio y variado dentro del surrealismo cubano.
Varela fue uno de los muy pocos, si es que no el único, filósofo latinoamericano del siglo XIX que escribió a favor de la tolerancia religiosa.
“Lourdes Gil fue en un principio una lezamiana convencida, discípula de aquella escuela mitificadora y densa de un barroco cubano”.
En el planeta Linkgua viven Don Quijote, Lezama y Ernesto Guevara, Lorca, Bernal Díaz, Vitruvio, los personajes de los Evangelios Apócrifos, los dioses de Lydia Cabrera y Ludwig Wittgenstein.
Cuando Chris Nash, decidió iniciar ‘In a Violent Nature’ con una conversación fuera de campo, sabía que estaba haciendo una declaración de principios.
El desmayo es una suspensión del yo. A eso hay que aspirar en la escritura, aunque se hable en primera persona.
Si hay un proceso interesante en las artes visuales en Cuba, es la evolución de la representación plástica de la figura y presencia social del negro.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski no “hizo su tarea” antes de entrar a la Oficina Oval con el presidente Trump y su vicepresidente, JD Vance. ¿Qué salió mal?
El reconocimiento del Estado palestino alcanza las 145 naciones, ya que Noruega, España e Irlanda se suman en medio de la actual ofensiva israelí en Gaza.
Georgia, imitando la legislación rusa, ha comenzado a perseguir a las ONG que reciben financiamiento desde el exterior, utilizando la nueva ley de “agentes extranjeros”.
La noticia me sorprende. “Se fue. Aún no sabemos si pudo llegar a la frontera”.
“Sería tan fácil como cruzarse de brazos: huelga general. Así fue como cayó Machado. Y ya Díaz-Canel dejó chiquito a Machado. Y a Batista. Parece empeñado en lograr lo que no pudo Weyler”.
Aunque sea improbable el antiguo sueño de una sociedad de seres individuales, libres y cultos, no es posible renunciar a tal sueño.
“La emigración es un negocio perfecto para el régimen, pues salen de todo los desconformes, que desprecian, y al mismo tiempo hacen dinero. Y es lo mismo que sigue pasando ahora, eso no ha cambiado nada, la emigración sigue manteniendo el país”.
Entrevista a la cantante, músico, actriz y presentadora cubana Lucrecia. Una conversación en la que hablamos sobre su relación con la Reina de la Salsa, sobre el enorme trabajo en ‘Celia Cruz: El musical’, los premios Alegría de Vivir, sobre sus últimos meses de trabajo y sobre su más reciente trabajo, ‘De mil maneras’.
“Muchos de nosotros hacemos periodismo y a la par hacemos activismo. Uno lo que tiene es que diferenciar los roles, y sobre todo ser consecuente con la ética de la profesión. Yo no voy a mentir. Sea cual sea la causa que defienda, mi compromiso es con la verdad, no con un partido político, no con una causa”.
La policía aprovechaba la ausencia de Reinaldo Arenas para desaparecerme asesinado de alguna forma.
Capítulo del libro ‘Historia de la música popular cubana. De las danzas habaneras a la salsa (1829-1976)’, de Antonio Gómez Sotolongo (Hypermedia, 2024).
Una Cuba cubierta de harapos pintorescos, poblada por sujetos serviles, desesperadamente xenófilos, humildes al borde de la miseria y siempre listos a gritar ‘¡Bienvenido, Míster Marshall!’
Alguna vez se habló de una visita a Cuba, pero eso nunca se concretó, aunque su hermano, de profesión novelista, sí llegó hasta acá.