Eamon Gilmore, representante especial de la UE para los derechos humanos, llegó a Cuba el jueves. Su visita, enmarcada en el contexto de un acuerdo UE-Cuba de 2017, que hace hincapié en el diálogo político y la cooperación, se centra en abordar la controvertida cuestión de los cientos de personas encarceladas tras las protestas antigubernamentales a gran escala que recorrieron Cuba en 2021.
Estas protestas estallaron durante dos días, del 11 al 12 de julio de 2021. Los ciudadanos, movidos por sus quejas por la escasez y su ansia de libertad, salieron a la calle en una muestra de desafío al gobierno sin precedentes. En respuesta, las autoridades cubanas detuvieron a unos 500 participantes, algunos de los cuales fueron condenados a penas de prisión de hasta 25 años. Sin embargo, grupos de derechos humanos y la embajada de Estados Unidos en Cuba estiman que el número de presos políticos, incluidos los detenidos tras las protestas, se acerca a los 1000.
La UE ha articulado su enfoque hacia Cuba como un “compromiso constructivo pero crítico”, una postura que la visita de Gilmore ejemplifica. Esta visita se produce tras una reunión celebrada en mayo entre Josep Borrell, máximo responsable de la política exterior de la UE, y las autoridades cubanas, en la que las consecuencias de las protestas de 2021 fueron un tema clave de debate. Se espera que la visita de dos días de Gilmore profundice en estas cuestiones.
Destacando el impacto personal de estos encarcelamientos, Liset Fonseca, madre de Roberto Pérez Fonseca, encarcelado durante 10 años tras su participación en las protestas, expresó su esperanza de que la visita de Gilmore atraiga la atención internacional sobre la difícil situación de los presos y sus familias. Fonseca, junto con otros familiares de manifestantes encarcelados, prevé reunirse con Gilmore para pedirle una revisión e investigación exhaustivas de los casos.
Gilmore, subrayando la amplitud de su agenda en Cuba, utilizó Twitter para anunciar su llegada a La Habana. Destacó su papel en la copresidencia del Diálogo UE-Cuba sobre Derechos Humanos en el marco del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (PDCA), y sus planes de reunirse con diversas entidades gubernamentales, instituciones y representantes de la sociedad civil para discutir una amplia gama de temas.
Esta visita simboliza un paso decisivo en los esfuerzos internacionales por abordar los problemas de derechos humanos en Cuba, especialmente tras las protestas de 2021 que han dejado una huella duradera en el panorama sociopolítico de la nación.
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