El ABC del Cementerio Beauvoir (lapidario)

No vine porque me dijeran que aquí estaba enterrada la Beauvoir sino porque, conociendo el prestigioso caudal que caracteriza a este peculiar cementerio sobre la rive gauche del río que la adoptó, no comprendía por qué ninguna guía de turismo recomendaba visitarlo ni nunca se hablaba de alguien famosx que estuviera o quisiera ser enterradx en él. 

Sabía que, a diferencia de otros camposantos, su creación había sido bastante reciente (1953, el año de mi nacimiento) y que, no obstante ser un sitio hoy calificado de diverso, ha sido en realidad muy exigente a la hora de elegir a sus huéspedes, ya que para obtener uno de sus espacios es requisito que lx interesadx someta por sí mismx, sin intermediarixs, su solicitud en escritura braille inclusiva a un comité indicado por la gerencia y regido por un estricto sistema de revisión ciega por pares. 

Dicha solicitud debe no sólo explicar en detalle los vínculos delx solicitante con la temática fundamentalmente de raíz beauvoiriana que es afín a este futuro landmark levantado por la Cultura Occidental para asombro y enxiemplo de otras culturas, sino además someter, a manera de epitafio y sin posible variación ulterior, el texto que se inscribirá en la futura lápida, como se inscribió quizás en la vida y/o cuerpo físico de cada solicitante.

La autoría consciente de tales textos póstumos despertó, pues, mi curiosidad literaria. Desde la primera vez que me paseé entre los túmulos, percibí que, aunque algunos vocablos y sintagmas se repetían de una lápida a otra, sendas narrativas y contranarrativas (l’Académie oblige) mostraban —sin cortapisas ideológicas— temas, voces enunciativas y formas muy diferentes entre sí y en inusitado diálogo, como en Comala, Spoon River y El diario que a diario de Guillén. 

Y, mientras más leía yo —que desde niño he sido “un fue y un será y un es” tan fijo como Quevedo—, mayor era mi desconcierto, al verme ante personalidades que habían vivido en tan inquieta e inquietante transición o libre peregrinaje. De ahí mi interés por crear este lapidario: quería darle algún sentido, no a los textos —que para tenerlo no necesitaban de mi intervención—, sino a mi desconcierto. Ahora me basta con querer creer que lxs difuntxs aquí congregadxs disfrutan ya de una paz que el mundo no sabe repartir a partes iguales, y que esta tierra final les ha sido hospitalaria y leve.


A: SERLO

Tenía razón Simone de Beauvoir con aquello de “no se nace mujer, se llega a serlo”. Mírame a mí, que no nací mujer y llegué a serlo.

Y a mí, que hombre no nací y aún no sé si llegue a serlo.

No sé tú, Simone: yo sí que nací mujer. ¿Cómo no serlo?

Nací mujer y qué difícil me resulta serlo.

Y más difícil aún, ¡no serlo!

Asunto de Uds., porque yo

no nací únicamente hombre o mujer,

y hasta ahorita no me ha interesado serlos.

Frente a múltiples adversidades, el hijito

de mamá se hizo hombre, sin serlo.

Nací mujer y me canto y celebro mi biología

y, más aún, mi femenil fisiología, al serlo.

Nací hombre o varón, según anunciaron

mi nacimiento al ver mi pipicito

—y mientras me duró duro, disfruté serlo.

Nací hombre y me vengo

del mundo siéndolo.

El mínimo común denominador

que al nacer nos agrupa como machos,

con los años, si continúa mínimo,

puede llegar a ser contra nosotros

un muy común y máximo divisor.

Interseccionemos, darlin’, hay que estar a la moda, aun cuando esta no sea novedad. Ahí te va: No se nace incapaz, se llega a serlo.

No es mi identidad sexual o de género

lo que hoy me interesa: es mi pobreza.

Si en lo político baso mi interseccionalidad,

aclaro que no es mi privada identidad sexual

o de género, lo que hoy más me interesa,

sino la de todo mi pueblo secuestrada libertad.

Todxs nacemos humanxs, y después es que algunxs dejan de serlo, como muestran la History y la Herstory.

(1931-2023)

Púber lector, desatiende esas fechas y hazme

sentir el iniciático aliento viril de tu mirada.

Aunque me tengan aquí por un difunto vejete,

soy, como Cecília Meireles, “la jamás nacida”

que vive “de nunca llegar a ser”.

OBSERVACIÓN:

Cada 24 de junio aparece en este túmulo una corona de flores con la siguiente inscripción: “Te recordamos siempre, IPCE y NAMBLA”.

A mis 15 años toqué a la puerta de mi vecino el famoso pintor —ya desde niña le tenía echado el ojo— para pedirle que me librara de la virginidad. Hoy cumplimos 50 años de estar juntos.

No nací humano pero llegué a serlo,

dijo el Muñeco de Paja y,

para no ver restringidos los fluidos

de su fluida sexualidad en estreno, prohibió

—las Leyes Nuevas lo amparan—

que le siguieran llamando Espantapájaros.

Si al inicio quiso aprovecharse de la objetificación

sexual que había en el apelativo “Muñeco”,

muy pronto vio que el onanista pegote “de Paja”

también le espantaba pretendientes; por lo que

aún anda en busca de un nombre más apropiado

a su actual condición de hombre cisgénero

pansexual poliamoroso y apronombrado él/lo.

NOTA DE LA GERENCIA:

Bajo ningún criterio, Muñeco de Paja constituye un caso de disforia de especie. En la solicitud sustentó con varios ejemplos multiculturales que su natural pajizo —y no pajero— no era ajeno a la especie humana: “En el principio, lxs humanxs surgieron del aliento divino insuflado en materias tales como barro, madera, trigo, papa, arroz y maíz”, explicó. Sin embargo, su transición no se debió a ninguna intervención externa (sea Dios, bisturí, hormonas, cuota o ideología ad usum), sino a sus méritos y esfuerzos personales.

¿Qué es más real —pregunta Nicanor Parra—,

“el agua de la fuente / o la muchacha

que se mira en ella?” ¿O su percepción del reflejo

(engaño doble al sentido común) que la movediza

corriente le ofrece a la chica como lo definitivo y real?

(2000)

“¿La homosexualidad? Si no hablo de esto con frecuencia es porque, para mí, es un asunto, estrictamente, de gusto personal. No le otorgo ninguna connotación, ningún valor, ni positivo ni negativo. No creo que represente una subversión, ni una virtud. Es como ser diabético, o filatélico. Algo que no merece ni el menor comentario” (Severo Sarduy, Antología, ed. G. Guerrero. FCE, p. 25).

No fui oso / no fui loca / no fui hada

no fui macho / ni fui sexy: / no fui nada.

(2014)

A esxs heterosexuales “que se nos aparecen delante prepotentemente con su capa protectora de monogamia, buenos deseos, pacifismo, tolerancia, integración y asquerosa heterosexualidad”, les decimos que “no nos identificamos con Uds., no nos gustan, los despreciamos, Uds. son el despreciable desperdicio del capitalismo que impulsan”, afirma una Manada de Lobxs siguiendo a N. Wolf (Foucault para encapuchadas. Milena Caserola, p. 68).

Para acabar con los ecos del género en nuestros cuerpos y en nuestras vidas, convocamos a la huelga de género. Proletarixs contrasexuales de todos los países (léase Occidentales), ¡uníos!

Caminante que me lees, te digo que en vida conocí

la censura que llegan a profesar ciertxs empoderadxs,

así como la autocensura que inoculan entre el pueblo.

Caminante, si al leerme sientes el sectario escozor

de censurarme, ¡refrénate!, que nada libera tanto

como el poder que se ejerce sobre unx mismx.

(20 junio 1973)

“No somos putos, no somos faloperos.

Somos soldados de FAR y Montoneros”.

Trivialidad no hay mayor que la de tomarse

unx mismx en serio, observó Oscar Wilde

sin percibir el peligro de esa trivialidad cuando llega

a empoderarse: no hay dictadorx del siglo XX

(por ejemplo, AH, JS, FF, MT-T, FC y PP)

que no haya censurado en su reino ovejuno

la menor pizca de humor sobre su figura y su carga

—gravosa para el Estado— de dislates e ideas.

Libraos de todo ello, pares míxs, y emprended vuelo

—que si los ángeles vuelan, dice GK Chesterton,

“es porque saben tomarse a sí mismos a la ligera”.

(Pizarnik)

alejandra alejandra

dentro estabas tú: alejandro

De tanto deconstruir mi género y mi sexo

por más de 20 años, resulta que hoy no existo.

Inteligente nací, me aseguraron

así, sin binarismos, mis padres

antes de venirme al college.

Y ahorita aquí, tras allegarme tantas

ilustradas creencias, dejé de serlo.


B: CREDOS

Cuando nací, mi asignación biopolítica

fue hembra, pero nunca llegué a creérmela.

Aun así tan divina como me ves en la foto, no nací mujer,

y hasta el final nadie pudo creerlo.

Aunque quería, no nací mujer ni me atreví a serlo;

mas creo, Dios Padre, en la Resurrección de los Cuerpos.

Ay, bendito, “¡cuán largo me lo fiais!”

Con esa creencia, sólo me queda sufrir

pasivamente mi predestinación biológica.

Dichoso el árbol —dijo Esdras Parra, no Darío—

que “intenta aún soñar otro destino”.

Yerran quienes me consideran ateo:

yo creo en mi SugarDaddy

y, gracias a Sus Ahorros e Ingresos,

en la Reasignación de los Cuerpos.

Sea quien quiera ser: si no nació como hoy quisiera, ¡llegue a serlo! Para consulta con Dr. Ch. Bístury, escriba a “cirujano@thankgod.org.va” o diríjase a 69 Via del Pellegrino, Bat City. Se aceptan beneficiarixs del Medicare, que nunca es tarde, si el bisturí es bueno.

Para mí siempre estuvo bien claro: cuando nací, mi cuerpo me traicionó, y, si fuera creyente, diría que fue Dios quien me deslocalizó. Pero, ¡ojo!: ni dislocada ni loca, sencillamente deslocalizada, hasta que decida hacérmela.

Ante lo que Dios me asignó, me reasigné;

y por un error de quirófano, me resingué.

Como lxs Sin Tierra y lxs Sin Casa, son

lxs Sin Cuerpo Correcto, alegan artivistas.

Pero en mi caso dicha tríada no era mero símil

sino la Trinidad. Gracias a Dios que,

libre ya del cuerpo, he hallado aquí por fin

tierra y casa donde caerme muerto (así, con o).

¿Recuerdas que querías ser una Sly Stallone?

Y entre jeringas y pastillas y polvos y visitas al gym

pasabas los días y yo desesperando te decía “Quizás,

quizás”. ¿Recuerdas que aún se hablaba

—y tú en particular lo hacías con freudiana fruición—

de la envidia del pene?

Hoy nadie admite que piensa en ella (la envidia),

aunque sí piense en él.

A fin de cuentas, los cuerpos teóricos que importan no son —diría hoy Marx sobre Feuerbach— los que interpretan la realidad, sino los que la transforman de un tajo irreversible —quirúrgico inclusive.

—Y eso, ¿qué es?

—Una iglesia.

—Y, ¿qué es eso?

Mirad los muros deste cuerpo mío

nunca tan fuertes como aquí acabados:

por mi narciso afán exagerado

encaro hoy lego el sumo desafío.

(1 julio 2022)

“Hay una cosa que ayuda mucho contra este narcisismo, desánimo y pesimismo, y es el sentido del humor: es lo que más humaniza. Dame, [Señor], el sentido del humor, que sepa apreciar un chiste. El sentido del humor es también reírse de sí mismo” (Papa Francisco, De la crisis no se sale solo, Télam Digital).

No nací Cuidador de Rebaños, mas, gracias a Dios y a Sus Ovejas, hoy finjo serlo.

Me convidaste a ser Pescador de Hombres,

pero hoy día son tan pocos y es tanta

la desterritorialización erógena,

que precisamos de otro milagro tuyo

—y biológico, por favor— de penes y pejes.

(1930-2020)

Viajero que vas, créeme cuando te digo que mi íntima edad no se atiene a cifras externas. Acércate más, que aquí te espera el impreciso cuerpo equivocado de tu eterna Lolita.

Creo en Dolce&Gabbana todopoderoso,

y en Versace y en Prada, sus mejores hijos,

y en Sephora y en Burberry,

y, como no soy elitista

y a veces la lana se pone difícil, creo además

en las Tiendas de Segunda Mano y en Walmart.

Cuentan que en el parisino café Les Deux Magots, un naturalista francés —en su mano izquierda Les contes drôlatiques, de Balzac—, pontificando y con el dedo índice apuntando hacia lo Alto, corrigió una vez a la Beauvoir al decirle que en la especie humana no se nace hombre o mujer, sino varoncito o hembrita; y acto seguido agregó: “Cualquier excepción al respecto (que las hay) nos confirma esta regla, por lo que es después de nacer que la gente se afilia, con mayor o menor voluntad o consumismo de género, a Dolce&Gabbana o a Walmart”.

Ni corta ni perezosa, la Beauvoir se defendió citando el siguiente pasaje del libro que él llevaba: Francisco y Margarita, dos niños “ingenuos” —según explica confundido Balzac por no haberse leído a la Butler—, se hallan ante dos cuadros bíblicos de Tiziano en que Adán y Eva aparecen desnudos. Francisco le pregunta a Margarita: “¿Cuál de los dos es Adán?” Y ella responde: “¡Ignorante!, para saberlo es necesario que se vistan”.

“Touché! —exclamó el naturalista—. O sea, no es sólo haber nacido en el cuerpo equivocado y corregirlo con las tecnologías ad usum, sino también vestirse de la tienda y del departamento correctos. Como profesional, veo en ello una variante del viejo conflicto entre el falso erudito y el hombre natural”.

¡Abajo el consumismo antiecológico del salvaje heterocapitalismo neoliberal! ¡Arriba los sex shops, los glory holes de los centros comerciales, los spilling gay cruises griegos y aquella guiobiblia predigital Spartacus!

De adolescente y aún sin documentos,

padecí de Hermenéutica Analduana o Anzalduana,

según me dijo en privado, sin alarmar a mis padres,

una preciada consejera del high school.

Luego en el college —aún sin documentos

y entonces sin pronombre apropiado—

aprendí que ese diagnóstico era incorrecto

y que mi dolencia personal y ahora política

—pues lo privado es público y, si púbico,

público dos veces—

se llamaba Epistemología Amatoria.

A un mes de graduarme, surgió de repente

una como revelación: Undocuqueer.

Y aunque no me sentía 100% así

—un 18.43% de mí quedaba fuera de esos

cucurrucucús—, eso era, según mis profes,

lo que yo verdaderamente resultaba ser.

Hoy con mi BA en tales urgentes asuntos

y por fin con los documentos y pronombres

correctos, deseo completar mi educación

con un PhD que me articule y desjerarquice

más a fondo con las avizoradas ondas por venir.

OBSERVACIÓN:

Sobre el mármol alguien escribió este grafiti: “ondas: rizos: rizar el rizo”.

A todo el mundo le encantó Sex and the City, mas yo como jíbarx no-binarix afrolatinx asexual no empaticé ni con las actrices ni con los rollos de sus personajes. No estoy, pues, facultadx para enjuiciar el filme: creo que no debo ni opinar.

Ok, ya entendí: no se nace mujer, etc. Pero… y nos morimos, ¿cómo? Ay, ma chère amiedo you believe in gender after death?

A la venta ya, traducidos al castellano, tres clásicos

de la Post-Narrativa Occidental Infanto-Juvenil:

Mis dos mamás (París: Gaymard, 1997; 20 €)

Mis tres abuelitas (Phoenix: Transtornos, 2019; 25 US$)

Mis ocho bisabuelas (Barí: CosasVeredes, 2023; 160 Bs).

De pronta aparición: Mis tres mamás y Proud Oedipus.

Para adquirirlos, contacte al Enterrador de la Comarca.

Cuando nadie lo esperaba,

cayó el Muro de Berlín.

Se acabó lo que se daba:

a buscarse un comodín.

Llamaban a toda aldaba

por minorías sin fin.

Y aunque en ellas yo me hallaba,

de su agenda articulada no era afín.

Decían liberarnos de unas opresoras estructuras patriarcales, mientras sus beatos discursos creaban —sumaban, empoderaban— otras, en un tableteante crescendo silábico: sexo, género, identidad, articulación, pornoterrorismo, interseccionalidad, desterritorialización, intergeneracionalidad… ¡De todas ellas —y de ellxs— corred, liberales del Perico!

Yo soy aquel maestro que en 2019 la Policía de la Moral de Al-Andalus condenó no sólo a dos años de prisión por usar el morfema masculino genérico en el aula, sino también a repetir de por vida el siguiente mantra antes de comenzar cada clase:

“No los adolescentes sino la adolescencia.

No los profesores sino el profesorado.

No los alumnos sino el alumnado.

No hombres ni mujeres sino la humanidad”.

Dicen que confundí / mi cuerpo con la muerte,

la muerte con la vida, / vivir con existir

sólo materialmente. / Pero yo no les creo.

(CONSULTA DEL DR. BÍSTURY)

FORMULARIO (autorizada su divulgación):

NOMBRE(S): Esdres Menstrual

CONTRANOMBRE(S): Fucó / Filimelé

FECHA(S) DE NACIMIENTO: Pat 3 abril 2000, Esdres 3 abril 2022

ASIGNACIÓN BIOPOLÍTICA: Prefiero no responder

GÉNERO(S): Fluidos

INTERIDENTIDAD(ES): Autosexual Gemini Apache NY-based Latinx

RELIGIÓN: Vegonanismo Psicobolche

EDUCACIÓN: Lic. en Estudios de Género y Lingüística Patriarcal

FILIACIÓN LABORAL: Starbucks (barista/de medio tiempo)

y Cuentaproprista (sexolonutrista)

PRONOMBRES PREFERIDOS: ‘ile’, con la siguiente declinación:

casos nominativo y vocativo: ILE

caso acusativo: LIM (proclisis, enclisis) / -ILI- (mesoclisis; desus.)

caso dativo: LIR (proclisis, enclisis) / -ILU- (mesoclisis; desus.)

caso genitivo: LO

caso ablativo LA

Ejs. Lim ves hoy (español) / Je veux lir donner ça (francés) /

Is this lo school? (inglés) / Tu amá-lili-ias? (portugués)

PROPÓSITO DE LA VISITA: Hacerla Hacérmela.

NOTA DE LA GERENCIA:

Aplaudimos el coherente desglose gramatical, ilustrado incluso con ejemplos plurilingües, del pronombre adoptado por Menstrual, ya que facilita y garantiza la enunciación correcta de sus interlocutorxs.

¡Oh, pecadorxs, dejad de serlo o, al menos, de hacerlo,

y detened, de paso, vuestros excesos consumistas!

—exhorta no sin drama el Santo Padre exhibiendo

con gracia divina una fabulosa sotana Versace

de levísimos tonos amarillos (él preferiría rojo)

que —elaborada con la más exquisita seda de morera

y unos delicados encajes de Malinas sobre motivos

aéreos y marinos (plumas, alas, pargos, chernas)—

desciende en suaves ondas por sus piernas,

sin librarnos del pecado venial de contemplar ano-

nadadxs los espectaculares mocasines negros Prada

con que Su Altísima recorre atonalmente

los inescrutables Caminos del Señor.

Après moi, le déluge, dijo una yegua

en medio del Apocalipsis.

No, señor, yo no me casaré,

así le digo a todes.

¿Qué tal si mi Adelita se fuera con otro,

o con otra, o con otre?

¿O decide ser Adelito o Adelite?


C: HACERLO/HACÉRSELA

Názcase varón o hembra, hombre o mujer,

hay quienes nunca llegan a hacerlo.

Caminante, tú que vas a nacer o ya naciste

hembra o varón, recuerda que nada ni nadie

debe obligarte a serlo o a no serlo,

ni a hacerlo o a no hacerlo.

De igual forma, ningún john-money (money!)

debe empujarte a hacértela.

Para ser fiel a mi perspectiva post-cisgénero,

¿qué nombre-talismán debo dar a esta construida

concavidad que hoy, ya lejos de mi infantil

atracción binaria por las mujeres,

satisfago en soledad con las mismas manos

con que le pagué al cirujano?

Lo básico: orquiectomía + penectomía + vaginoplastia

+ vulvoplastia + clitoroplastia + labioplastia.

Lo recomendado: prótesis + lipofilling.

Lo opcional: afinar rostro + eliminar vello

+ reducir Nuez de Adán (cartílago tiroides).

Cambio de sexo > Reasignación > Afirmación

OBSERVACIÓN:

Sobre el mármol alguien escribió este grafiti: ‘negación’.

—No, señor notario, ¡Dios me libre!, aclara Anacleta Pichilengue Festiva. ¡Jamás pensé en algo así! Lo mío es cambiarme el nombre y, si se puede, los apellidos.

—¿Que por qué? Pues vea Ud.: solito Dios sabe el estrés en que he vivido desde niña por culpa de mi nombre ridículo. Necesito ya un “reposo nominal”, como recomienda este certificado médico. Y las Leyes Nuevas me amparan, ¿verdad?

—Claro que ya escogí el nuevo nombre. Cámbieme todo por nomás Leididí, que fue lo máximo, después de nuestra Virgencita, ¿verdad, señor notario?

—Uy, perdone Ud. ¡Qué pena, Dios mío! Distraída que es una, y estas gafas que no me dejan ver, señora notaria.

—¿Qué? ¿Tampoco es con a? Ignorantx que es unx.

¡Sólo tres sesiones de una hora y Ud. irá de los conformistas y repetitivos intercourses hetero, homo y transnormativos, a los intracourses unipersonales en grupo más creativos y subversivos sociopolítica y culturalmente que existen! 

17,000 colones. BYOKK.

Dirige el taller: Esdres Menstrual.

Manual requerido: Varixs autores, Prácticas dildotectónicas y orgasmosimuladoras (Rotenburg, Alemania: Silvestri y Torres, 2001).

Copatrocinio: LGBTQIA2+S+ / BDSM / Disney.

Próximo taller: Prácticas y Experiencias Corpo-abortistas. Patrocinio: IPPF.

Como tanto se le nota,

no hace sino dar la nota.

“Debo hacer algo al respecto”, anota

en su cuaderno de notas.

MEMO PARA PERFORMANCE:

-peruca de trenzas gualdas y zapatos rojos de tacón estilete

-minifalda de leves tons amarelos y medias largas com motivos aéreos y marinhos

-um mes sem me afeitar barba ni axilas

-delineador branco, lipstick morado y un arete de coral rosado

-camiseta azul súper ajustada y sin mangas

-boina preta de La Favorita com estrelinha Chea

-antes de me vestir, sudar duas horas intensas de braços y zona media en el gym y no bañarme ni perfumarme

-ler sobre Radical Faeries y memorizar Sor Juana (“Este que ves, engaño colorido”) para recitar na marcha na Catedral (perguntar de qué va la protesta?)

-ah, y a bandana da bandeira, cerciorarme de que não seja uma redundância desnecessária

Kimonos, estolas, pantimedias, déshabillés…

Nada de lo que llegué a ser y a hacer

con mi cuerpo equivocado, me trascenderá.

En lo esencial —muy tarde lo comprendí— tuve

una vida demasiado común, demasiado normal.

Razón tenía el poeta náhuatl: “Nada te llevarás”.

Ay, ¿ubi sunt aquellos fabulosos trapos

que no me pude traer?

¡Y que después de tanto idear y hacer

lo imposible e inaudito para divinamente

crearme y ser a mi propia imagen y semejanza,

me vengan a decir que sólo reproduzco

un preestablecido constructo sociocultural

y no soy más que un amasijo de ladrillo y cemento

—¡ah de mis kimonos, mis lipsticks, mis déshabillés!—

en las manos y mentes de sabrá-postMarx qué Albañiles!

¡Le zumba el merequetén!

Áian sorri con eskiusme, madán Bobuar,

no sé Su Merced, pero yo sí que nací y fui

mujer desde muy niña.

Es más, desde antes de nacer: recuerdo

que dentro del vientre de mi padre [sic]

mis pataditas no eran de futbolista,

sino de ballerina en zapatillas de media punta.

Así que hágame el favor y quíteme la vista

de esta maldita Nuez de Adán, que yo soy Eva.

Como el kafkiano pájaro en busca de su jaula

o la jaula tras su pájaro (no pun intended),

una irredenta por incorregible Nuez de Adán,

después del trabajoso bisturí del carrocero,

va confiada en busca de su Ardilla, o viceversa.

Que it takes two to tango —si no, ¡de qué vale

bregar con pasillos tan riesgosos!

Nacimos machos / y hoy somos hombres,

pero qué importa: / Ven, papi, a hacerlo.

Para mover mi mundo macorino, bastaba con que pusieras tu palanca allí, en mi otrora punto de apoyo.

¿Has decidido ya, San Pablo, cómo

lo haremos (¿lo haremos?) después

de la Resurrección de los Cuerpos?

Y mientras no llega ese día ni arribas

a una decisión convincente, ¿podrías darnos

a los hombres cisgénero de la tercera edad

que anhelamos hacerlo, un anticipo

de resurrección en la calentura de la zona

otrora tórrida que nos clasificó al nacer?

Todos nosotros, junto con nuestrxs amantes,

te estaremos muy agradecidos.

No se resucita como mujer, se llega a serlo.

—¡Ay, no! ¡De nuevo! ¡Qué pereza!

Si no sos conformista ni reasignadx o afirmadx total, visitá nuestra tienda naturista Poco a Poco y Paso a Paso. Conocé nuestro inventario de hormonas vegetales MaF, FaM, MaN-B y FaN-B; y de hormonas animales protándricas (de pez payaso / amphiprion ocellaris) y protóginas (de estrella de mar / asterina gibbosa). Aprovechá nuestros famosos descuentos en cada Navidad, Januca, Ramadán, Diwali y Vesak. Al salir, a la derecha —si te ofende, salí de espaldas.

(1929-2021)

“Vos no te imaginás cómo en esta pálida vida mía estoy todo el tiempo viendo las brillantes imágenes de esa otra de la que una vez pensé que me alegraba haberme liberado”, escribe la performática Clare Kendry a Irene Redfield (Nella Larsen, Passing. Penguin, p. 11).

Imagino ya vuestra sorpresa

cuando, tras mi muerte, descubráis

que toda mi vestimenta, excepto

los zapatos, era reversible

—si algo aprendí en vida fue a tener

bien puestos los pies sobre la tierra.

(Julio 2015)

¡Salvemos el planeta: no sigamos violentando a la naturaleza para que satisfaga los intereses del Kapital!, articularon paradojalmente ayer tres reasignadxs o afirmadxs totales durante un performance contrasexual (alias pornoterrorista) en la UBA.

Yacen aquí sepultados

los muros de mi prisión.

¿Será la liberación

u otra cárcel lo que espera

bajo esta piedra’e cantera?

Nací (creo) y creo (quiero creer) que,

haciendo y así haciéndome, sin vanos

artificios del cuidado, llegué a serme.

Cuando me muera yo quiero,

sin género ni cuidado,

tener en mi tumba a un lado

un sinsonte mañanero

cantándole al mundo entero

los cielos en que viví

más allá de si nací

hombre, mujer, macho o hembra:

sólo recoge quien siembra

en tierras del yo-sí-fui.

Aviso de la Gerencia

Nos llena de placer informar que el proyecto de acoger en nuestras instalaciones las Leyes Nuevas sobre los derechos familiares de las mascotas, acaba de recibir la Beca Guggenheim. Por consiguiente, hemos extendido nuestros cada vez más requeridos servicios, a las mascotas de nuestrxs presentes y futurxs residentes humanxs. 

Para calificar, cada mascota deberá demostrar en su solicitud lo siguiente: (1) ser miembrx oficial del núcleo familiar (i.a., partida de nacimiento, declaración de impuestos, poder notarial médico, cuenta de banco o de teléfono en común) y (2) haber tenido, como sus parientes humanxs, alguna peculiar experiencia de género, sexualidad y/o identidad. 

Recordamos que toda solicitud debe utilizar un lenguaje inclusivo que sea consistente de punta a rabo (no pun intended), ya que se espera que lxs nuevxs candidatxs dominen a cabalidad la Morfosintaxis, al menos là-bas

Por otra parte, informamos que la disforia de especie, tanto en las mascotas como en lxs humanxs, seguirá sin contemplarse en nuestros estatutos, mientras no aparezca un texto peer-reviewed de Mme. Beauvoir u otra similar autoridad que justifique científicamente, sin lugar a confusión o duda, dicha incorporación.





vi-premio-de-periodismo-editorial-hypermedia

VI Premio de Periodismo “Editorial Hypermedia”

Por Hypermedia

Convocamos el VI Premio de Periodismo “Editorial Hypermedia” en las siguientes categorías y formatos:
Categorías: Reportaje, Análisis, Investigación y Entrevista.
Formatos: Texto escrito, Vídeo y Audio.
Plazo: Desde el 1 de febrero de 2024 y hasta el 30 de abril de 2024.







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