“Las revoluciones contrarias a la naturaleza humana son difíciles y a menudo requieren el uso de la violencia”.
“Las revoluciones contrarias a la naturaleza humana son difíciles y a menudo requieren el uso de la violencia”.
Hoy se ha sustituido el halago por la diplomacia, la bravuconería por la negociación y, negando todo lo que Charlie Kirk representa: la imposición por la palabra.
El animalario de Jorge Camacho es el más amplio y variado dentro del surrealismo cubano.
El ministro ucraniano de Asuntos Exteriores valora un plan de paz que podría poner fin a la guerra, centrado en la retirada de las fuerzas rusas.
La idea de una Revolución que no había llegado hasta sus últimas consecuencias oponía un expediente de violencia política a los instrumentos que brindaba la democracia.
El perfil oscuro de los crímenes de Watkins es fuego que quema. El tipo usó a las madres de dos de sus víctimas como cómplices.
¿Será el favorito a la alcaldía de Nueva York una bendición para el Partido Demócrata o una carga que arrastre su suerte?
Si algo enseña la historia, es que las aventuras de cambio de régimen de Estados Unidos casi nunca terminan bien.
‘Narcisos’ es una de esas escasas piezas literarias que operan simultáneamente en varias alturas del pensamiento y la emoción.
Cuando conocí a Reinaldo García Ramos (Cienfuegos, 1944 – Miami, 2024), era yo un joven ávido de sabiduría y él un hombre “abrumado de virtudes”.
El yo de cualquier artista sólo resulta interesante cuando nos propone una relación incómoda con la realidad.
La Isla de los Palestinos en el Golfo de América: Gaza convertida en balneario y Cuba en un condado de Florida.
Es agosto y el sol del mediodía seca la sabana con una luz blanca. El último vagón del tren se aleja por las vías.
La música de nuestro himno no tiene tambores batá, ni décimas guajiras, ni claves afrocubanas. Es una marcha europea. Blanca. Neoclásica.
Si me dieran a escoger entre haber sido un vástago de Rockefeller o la piedrita en el zapato que fue Ida Tarbell, ya se imaginan qué preferiría.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski no “hizo su tarea” antes de entrar a la Oficina Oval con el presidente Trump y su vicepresidente, JD Vance. ¿Qué salió mal?
El reconocimiento del Estado palestino alcanza las 145 naciones, ya que Noruega, España e Irlanda se suman en medio de la actual ofensiva israelí en Gaza.
Georgia, imitando la legislación rusa, ha comenzado a perseguir a las ONG que reciben financiamiento desde el exterior, utilizando la nueva ley de “agentes extranjeros”.
La noticia me sorprende. “Se fue. Aún no sabemos si pudo llegar a la frontera”.
“Sería tan fácil como cruzarse de brazos: huelga general. Así fue como cayó Machado. Y ya Díaz-Canel dejó chiquito a Machado. Y a Batista. Parece empeñado en lograr lo que no pudo Weyler”.
Aunque sea improbable el antiguo sueño de una sociedad de seres individuales, libres y cultos, no es posible renunciar a tal sueño.
“La emigración es un negocio perfecto para el régimen, pues salen de todo los desconformes, que desprecian, y al mismo tiempo hacen dinero. Y es lo mismo que sigue pasando ahora, eso no ha cambiado nada, la emigración sigue manteniendo el país”.
Entrevista a la cantante, músico, actriz y presentadora cubana Lucrecia. Una conversación en la que hablamos sobre su relación con la Reina de la Salsa, sobre el enorme trabajo en ‘Celia Cruz: El musical’, los premios Alegría de Vivir, sobre sus últimos meses de trabajo y sobre su más reciente trabajo, ‘De mil maneras’.
“Muchos de nosotros hacemos periodismo y a la par hacemos activismo. Uno lo que tiene es que diferenciar los roles, y sobre todo ser consecuente con la ética de la profesión. Yo no voy a mentir. Sea cual sea la causa que defienda, mi compromiso es con la verdad, no con un partido político, no con una causa”.
La policía aprovechaba la ausencia de Reinaldo Arenas para desaparecerme asesinado de alguna forma.
Capítulo del libro ‘Historia de la música popular cubana. De las danzas habaneras a la salsa (1829-1976)’, de Antonio Gómez Sotolongo (Hypermedia, 2024).
Una Cuba cubierta de harapos pintorescos, poblada por sujetos serviles, desesperadamente xenófilos, humildes al borde de la miseria y siempre listos a gritar ‘¡Bienvenido, Míster Marshall!’
Alguna vez se habló de una visita a Cuba, pero eso nunca se concretó, aunque su hermano, de profesión novelista, sí llegó hasta acá.