Víctor Varela (La Habana, Cuba). Dramaturgo, ensayista, escritor y artista visual. Creador de Teatro Obstáculo y de su concepto actoral. Vive exiliado en New York.

Víctor Varela (La Habana, Cuba). Dramaturgo, ensayista, escritor y artista visual. Creador de Teatro Obstáculo y de su concepto actoral. Vive exiliado en New York.
No hay alivio en la voz del revolucionario o fidelista; sin embargo, el llanto de las caderas es siempre liberador bajo la voz sazonada del choco-reparto.
La expedición Guanabá partió de La Habana hacia Guanahacabibes el 31 de agosto de 2023, con el objetivo de monitorear los nacimientos de tortugas verdes, en el extremo oeste del archipiélago cubano.
Conociendo el prestigioso caudal que caracteriza a este peculiar cementerio, no comprendía por qué ninguna guía de turismo recomendaba visitarlo ni nunca se hablaba de alguien famosx que estuviera o quisiera ser enterradx en él.
Sin candidatos capaces de disputarle la presidencia, Putin se prepara para un quinto mandato, lo que le garantizaría más de un cuarto de siglo al frente del Kremlin.
Jimmy Chérizier, alias “Barbecue”, pasó de agente de policía a jefe de una banda, y ahora es una pieza clave en el caos de Haití, uniendo bandas y desafiando al primer ministro.
Con mucha más razón debemos preocuparnos para que ninguno de nuestros gestos o actos beneficien, así sea indirectamente, a quienes insisten en controlar nuestras vidas, incluso a distancia.
Los días de San Valentín de hoy, no son los mismos de antes, en La Habana del asombro, en La Habana-regazo.
Citar a Néstor Díaz sería una deshonra. Copiar aquí un poema entero, con el deseo que tengo de hacerlo, un deseo político y sexual, abajo Donald Trump, sería una deshonra y una ganga. En Miami no se fía.
Esta obra del artista Julio Llópiz-Casal pertenece a la serie Licencia de conducción, publicada en La Fracción, una sección de Hypermedia Magazine.
Es más fácil relacionarlo todo con Estados Unidos, “nuestro enemigo histórico”, y aunque muchos jóvenes sabemos que nada de eso es cierto, ese cuento se lo han embutido a nuestros padres y abuelos como polluelo en nido, y algunos son hasta capaces de picarnos la cara por defender el absurdo establishment.
La otra Gertrude, vestida con batón negro y pañuelo blanco en el cuello, la mira desde la pared de la chimenea. Cuando Picasso terminó el retrato, luego de noventa días de trabajo, Gertrude quedó insatisfecha. “¿Nos parecemos?”, preguntó. “No te preocupes, con el paso de los días te le irás pareciendo”, respondió el artista.
¿Cómo podemos intimar y combatir lo impersonal, respetando la cultura alemana sin llegar a perder la nuestra? Es a partir de este cuestionamiento que Bárbara Lehnebach (Chile, 1984) realiza su serie fotográfica Residence, en la residencia estudiantil Paul Sudeck Haus en Hamburgo.