Un grupo de emigrantes cubanos llegó al Capitolio en Washington, D.C., para solicitar a la administración Biden que les conceda parole, permitiéndoles beneficiarse de la Ley de Ajuste Cubano. Estas personas fueron liberadas previamente en la frontera estadounidense con un formulario I-220A, documento cuya validez para la residencia en virtud de la citada Ley ha sido cuestionada.
Antecedentes de la Ley de Ajuste Cubano y el formulario I-220A
La Ley de Ajuste Cubano, una ley de 1966, permite a los nacionales cubanos solicitar la residencia permanente en Estados Unidos tras un año y un día de presencia en el país. Sin embargo, un reciente fallo judicial determinó que el formulario I-220A, entregado a estos emigrantes al ser liberados, no satisface el requisito legal de ser “inspeccionado y admitido” en Estados Unidos, como estipula la Ley.
La difícil situación de los inmigrantes cubanos
Vladimir Valdivia, ciudadano cubano del grupo, compartió su experiencia de entrada irregular en Estados Unidos hace más de dos años. Detenido por las autoridades de inmigración y posteriormente puesto en libertad con una I-220A, u “Orden de Libertad bajo Reconocimiento”, Valdivia expresó su persecución política en Cuba, que le llevó a huir. Pero su situación actual sigue siendo incierta, ya que describió estar en un “limbo migratorio”.
Muchos cubanos se encuentran en una situación similar, habiendo recibido el formulario I-220A que sólo especifica cuándo y dónde presentarse ante un oficial de inmigración, a diferencia de otros que recibieron parole.
Discrepancias legales y apoyo político
En septiembre, la Junta de Apelaciones de Inmigración de EE.UU. dictaminó que los cubanos con un formulario I-220A no son elegibles para la residencia permanente en virtud de la Ley de Ajuste Cubano. Esta decisión se produjo tras una apelación del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) contra la sentencia de 2022 de un juez de Florida, que favorecía la residencia para un emigrante cubano con un I-220A.
La congresista republicana María Elvira Salazar se reunió con el grupo cubano en Washington, abogando por su elegibilidad bajo la Ley de Ajuste Cubano. Criticó la incoherencia en el tratamiento de los emigrantes cubanos y pidió a la administración Biden que les conceda parole en el país.
Esfuerzos para la regularización
Olga Rodríguez, otra miembro del grupo, lamentó su entrada irregular en EE.UU. con un I-220A, lo que ha dificultado su capacidad para regularizar su situación. Del mismo modo, Luis, otro cubano con un I-220A, consiguió solicitar asilo político, una vía que no está al alcance de muchos de sus compatriotas.
Cifras récord y luchas en curso
En el año fiscal 2023 se produjeron más de 142 000 cruces fronterizos irregulares de cubanos, según la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras. Esta afluencia supera las cifras combinadas del éxodo del Mariel de 1980 y la crisis de los Balseros de 1994, lo que supone un récord de migrantes cubanos a Estados Unidos.
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“Por ahora, solamente le puedo confirmar que necesitamos todos los dólares que podamos conseguir”, dijo el coronel Antonio de la Guardia.
