La exposición de arte “Morir es vivir” revela la cruda realidad de la vida cubana

En el corazón de Bogotá, la Galería Juanita Echeverry Art acogerá una conmovedora y evocadora exposición de artes visuales titulada “Morir es vivir”.

Esta exposición, que se celebrará del 23 al 26 de noviembre, presenta las obras de tres artistas cubanas: Nadia Díaz Graverán, Camila Lobón y Carla M. Bellido. Su arte explora la realidad de la vida en Cuba, un país que parece cada vez más inhabitable.

La comisaria Anamely Ramos articula la esencia de la exposición: En ‘Morir es vivir’, “tres mujeres cubanas observan y expresan la realidad de un país que se desvanece lentamente. Reaccionan al desastre con dolor e indignación, devolviéndolo a través de diferentes visiones”. Esta afirmación marca el tono de una exposición que promete ser tan desafiante como esclarecedora.

Cada artista aporta a la exposición una perspectiva y un estilo únicos:

Camila Lobón representa a sus personajes en medio de imágenes crudas y emotivas, entremezcladas con sátira y cinismo. Sus historias, que recuerdan a los cuentos infantiles, se transforman en fábulas amargas, con el objetivo de exorcizar demonios a través de la repetición.

Carla María Bellido expresa un silencio tan profundo que se convierte en una afirmación del ostracismo. Sus collages, que mezclan el hermetismo con formas abstractas pulidas, casi antisépticas, revelan ocasionalmente elementos sorprendentes como dientes, ojos demasiado abiertos o pelo. Sus obras sugieren que incluso el glamour puede ser doloroso, con lentejuelas capaces de herir.

Nadia Díaz Graverán, quizá influida por su papel de madre, utiliza el simbolismo ritual para mostrar lo que queda por salvar en un país en el que las pérdidas superan a las ganancias. Para ella, el concepto de patria está tan codificado en los grandes símbolos como en los frutos de la tierra que nos nutren, subrayando que cuando un país sufre, también lo hace su tierra.

Esta exposición en la Galería Juanita Echeverry Art, ubicada en la Cra. 22 #74-22 en el barrio Barrios Unidos de Bogotá, es una profunda reflexión sobre la experiencia cubana. A través de las lentes de estas tres mujeres, “Morir es vivir” invita al espectador a enfrentarse a las complejas, y a menudo dolorosas, realidades de una nación en convulsión.