La estrella cubana de flamenco Irene Rodríguez hace de Tampa su nuevo hogar, compartiendo su pasión y reconstruyendo su vida a través de la danza.

La estrella cubana de flamenco Irene Rodríguez hace de Tampa su nuevo hogar, compartiendo su pasión y reconstruyendo su vida a través de la danza.
Aunque sea desde el cariño, mis hijos deben saber que abuela también fue responsable de la huida de papá; que un tío abuelo de June, Nina y Nikita fue a gritarle a papá gusano, contrarrevolucionario, delincuente, con su uniforme de teniente coronel.
Estoy cumpliendo 40 y hay algo bien roto. ¿Qué coño me pasa? Nada me motiva. Nada me puede motivar.
Armando Lucas Correa (Guantánamo, Cuba, 1959) Escritor, investigador, periodista y editor cubano. Su primera novela, “La niña alemana” vendió más de un millón de ejemplares. “El silencio en sus ojos” es su más reciente trabajo. Reside en Nueva York.
La libertad se parece a esa sonrisa con que la muerte nos llama. Es promesa de una plenitud allende el turbio reino de este mundo.
Estos creadores se suman a los quince artistas encarcelados a lo largo de todo el país, por los que sostenemos una campaña de liberación.
“Al matar a Alexei, Putin mató la mitad de mí… Pero aún conservo la otra mitad, y eso me dice que no tengo derecho a rendirme”.
“La libertad es una fuerza transformadora que ha demostrado tener la capacidad de hacer realidad sueños que, hasta hace poco, eran patrimonio exclusivo de la ciencia ficción”.
¿Cómo era el día a día de Alexei Navalny en la prisión “Lobo Polar”? ¿Qué se sabe de su muerte? ¿Qué es el “síndrome de la muerte súbita rusa”?
Yo quiero que el Estado cubano respete el derecho a que cada cual piense lo que quiera y lo diga como lo quiera decir, porque así sabré cosas verdaderas de todos. No solamente de los 30 que entramos la noche del 27 de noviembre al Ministerio de Cultura, también de los más de 500 que estaban afuera esperándonos, y a los que no les pudimos dar una mejor noticia.
Movimiento (y no grupo) sugiere una expansión abierta e ininterrumpida. La reciente congregación de centenares de artistas ante la sede del MINCULT debe verse como una prolongación del Movimiento y como un indicio de que los activistas están sacudiendo el orden imperante.
Sentí la represión creciente del régimen como revolucionaria radical, que era como yo me definía. La homofobia me pareció retrógrada, catastrófica para el país entero. Sin embargo, la represión que sentí desde que tuve uso de razón, fue por ser mujer. Lo viví de niña, de adolescente, y de joven adulta. Hasta que me fui del país.
“En un artista que se está desarrollando constantemente como individuo, es presuntuoso decir: esto está hecho. Además de presuntuoso, podría resultar falso. Autoengaño, incluso. Yo siempre veo algo más que va a llevar a la pieza al lugar mágico, al brillo cegador de la perfección…”.