Tras los Juegos Panamericanos, varios atletas cubanos han solicitado asilo en Chile. En un día lluvioso de primavera en Santiago, la capital de Chile, estos atletas, que inicialmente representaban a Cuba, emprendieron un nuevo viaje. Su primera aparición pública fue en un gimnasio local, simbolizando su transición de representantes cubanos a solicitantes de asilo.
Yunia Milanés, una figura destacada entre las seis jugadoras de hockey sobre hierba solicitantes de asilo, expresó alivio y esperanza para el futuro. “Ya nos sentimos más tranquilas; si Dios quiere, conseguiremos todo lo que esperamos”, declaró. Las deportistas han mostrado un fuerte deseo de integrarse en su nuevo entorno, con aspiraciones a formar parte de “Las Diablas”, la selección nacional chilena de hockey sobre hierba.
El número de solicitantes de asilo ha aumentado desde que concluyeron los Juegos el domingo, con una séptima atleta que se une a las seis mujeres originales. Este grupo forma parte de una tendencia más amplia, ya que otros tres atletas cubanos habían huido anteriormente durante otra competición atlética celebrada en Chile en mayo.
Mijaíl Bonito, el abogado que asesora a estos atletas, confirmó que han recibido documentos de residencia temporal mientras se tramitan sus casos de asilo. Este hecho es significativo, ya que pone de relieve la voluntad de Chile de proporcionar refugio y apoyo a estos atletas en medio de sus difíciles circunstancias.
La embajada de Cuba en Chile aún no ha respondido a estos acontecimientos. Mientras tanto, el gobierno del presidente chileno Gabriel Boric reconoció la situación a principios de esta semana. Un portavoz del gobierno confirmó a Reuters que habían recibido diez solicitudes de refugio de atletas cubanos.
Esta situación arroja luz sobre el contexto más amplio de la situación actual de Cuba. La isla se enfrenta a una crisis económica cada vez más profunda, que ha provocado una emigración mayor de lo habitual. Unos 20 atletas de la delegación cubana no han regresado a su país, lo que pone de manifiesto la gravedad de la situación.
Lázaro Tolón, uno de los atletas que permanecen en Chile desde mayo, se refirió a la complejidad de su decisión. “Súper difícil, súper complejo”, describió, indicando que la búsqueda de la libertad fue la fuerza impulsora de su decisión de quedarse.
