El tira y afloja en curso
A pesar de la retórica esperanzadora durante su campaña, la administración del presidente Joe Biden ha mantenido una relación distanciada con Cuba, una postura que comenzó a solidificarse bajo el liderazgo del presidente Donald Trump. Esto ha causado preocupación entre abogados y profesionales de negocios que esperaban potenciales oportunidades económicas en la nación caribeña, manifiesta la publicación Law.com.
En su presidencia, Barack Obama había encendido las esperanzas de una mayor colaboración y turismo con Cuba. Sin embargo, los acontecimientos y políticas posteriores, especialmente bajo Trump, enfriaron significativamente el ambiente de negocios, comenta Alexander Lugo, autor del artículo.
John Kavulich, presidente del Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba, señaló los desafíos para las empresas dada la medida de la administración Trump de incluir a Cuba en la lista de terrorismo patrocinado por el Estado. Esta designación pone a cualquier banco que trate con Cuba en riesgo de sanciones significativas. Un ejemplo de esto es la multa de $ 1,3 mil millones del banco francés Societe Generale en 2018 por violar las sanciones de Estados Unidos a la nación. Además, los cruceros también se enfrentaron a fuertes multas que ascienden a 440 millones de dólares debido a violaciones de la Ley de Libertad.
Kavulich resumió el sentimiento: “Los directores financieros de las empresas dicen: ‘Espera un minuto, ¿Cuba es tan importante para nosotros que necesitamos arriesgarnos a los problemas de cumplimiento?’. Y la respuesta es no”.
Preocupaciones por la seguridad nacional y señales de progreso
En medio de las preocupaciones existentes, había pruebas de operaciones de espionaje chino en Cuba. Esto, combinado con la dureza con la que el gobierno cubano trató a los manifestantes en 2021, ha aumentado el escepticismo sobre la renovación de los lazos.
Sin embargo, hay un resquicio de esperanza. Pedro Freyre, presidente de la práctica internacional de Akerman, destacó que Cuba ha autorizado la creación de pequeñas y medianas entidades privadas conocidas como “Mipymes”. A medida que el sector estatal oficial lucha, estas entidades están asumiendo un papel más dominante en la economía cubana.
Freyre se muestra optimista, señalando el reciente aumento de las exportaciones estadounidenses a Cuba, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos. Aunque su empresa ha observado un creciente interés en Cuba este año, los actuales obstáculos hacen que sea una empresa precaria.
Para concluir, Freyre subrayó la importancia de que EE.UU. tenga presencia en Cuba, especialmente cuando países como Rusia y China son influyentes allí:
“Los únicos agentes de influencia en Cuba son dos de nuestros grandes adversarios: Rusia y China. Si vas a intentar influir de alguna manera en Cuba, tienes que estar allí”, afirmó Pedro Freyre, director de la práctica internacional de Akerman.
Y puntualizó: “¿Qué mejor herramienta que una económica que ayude a la empresa privada en Cuba?”.
Iglesia Católica de Cuba lanza contundente denuncia
La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba denuncia en su Plan Pastoral 2023-2030 una profunda crisis nacional, destacando escasez, desesperanza y un éxodo masivo de jóvenes.
