Existía en La Habana un espacio donde una mujer abría a cualquier hora las puertas de su pequeña casa para recibirnos a todos.
Existía en La Habana un espacio donde una mujer abría a cualquier hora las puertas de su pequeña casa para recibirnos a todos.
Fragmento de la novela ‘El color del verano o Nuevo Jardín de las Delicias’ del escritor cubano exiliado Reinaldo Arenas (1943-1990).
Un ataque aéreo israelí en Rafah mata a 35 personas después de que Hamás lanzara cohetes contra Tel Aviv. Se trata del primer ataque de este tipo en meses.
Películas que se produjeron bajo el control absoluto de Alfredo Guevara… ¿Alfredo qué? Alfredo L. Guevara Valdés… ¿Y quién fue Alfredo L. Guevara Valdés?
Quiero escribir, pero me sale Miami. Lo mío no es la literatura, lo mío es Miami.
La historia demuestra que las concesiones a regímenes como el cubano solo fortalecen su control represivo.
Mi esposa y yo, en una vida que teníamos entonces, una que no es similar a la de Normandy Isles.
El mariscal Antonio José de Sucre fue un hombre muy culto y muy decoroso en palabras. Contrastaba en esto con Bolívar.
La relación de Lezama con la joven cultura revolucionaria fue compleja. Concibió la absurda idea de que la destrucción revolucionaria del Antiguo Régimen de la cultura cubana no implicaba por fuerza su propia destrucción.
Fidel encarnaba no solo al soltero que había desposado a la Patria, sino también al monje célibe, al intelectual insomne, y al ciudadano soldado.
El asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio, pone al descubierto la impunidad de que goza el narcotráfico en América Latina.
El ensayo literario es un problema cuántico. Lidia con el pensamiento, con el lenguaje y con un objeto equis que cambia sus propiedades y estados, según sea observado.
Sayde Chaling-Chong García: Activista por los Derechos Humanos. Presidente de la Alianza Iberoamericana Europea contra el Comunismo. Chino hispano cubano. Antifascista y anticomunista.
Esta acción forma parte del acuerdo migratorio Movilidad Segura, que el gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador aceptó.
Nadie decide enfermarse de coronavirus, pero la decisión de a quiénes, cómo y cuándo se les ha de administrar los recursos indispensables para la subsistencia es, indudablemente, un acto ético y político de la mayor relevancia. Este acto se realiza desde criterios de selectividad y, por lo tanto, de exclusión sobre vidas que previamente han sido signadas por la violencia.
“Como dijo Osvaldo Sánchez, yo soy de una obstinación casi reaccionaria. En La Habana de los ochenta, cuando ocurrió la explosión de las artes visuales y todos mis colegas empezaron a hacer extraordinarias instalaciones, yo me preguntaba: ¿qué hay de malo en seguir pintando?”