En la Cuba real, cualquier alegría tiene que ver más con un deseo que con un estado mental donde existan motivos comprobables para el júbilo.
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En la Cuba real, cualquier alegría tiene que ver más con un deseo que con un estado mental donde existan motivos comprobables para el júbilo.
La locura es un territorio al que han sido desterrados millones de seres divergentes del constructo cultural conocido como “normalidad”.
Ya mi país-hogar, tal como lo recordaba, se esfumó. También emigré, aunque mi cuerpo permanezca.
La permanencia en la mentalidad colectiva de la época colonial se extiende al futuro.
La noticia me sorprende. “Se fue. Aún no sabemos si pudo llegar a la frontera”.
“Quiero presentar mi lista personal de las películas que cumplen 50 años en 2024, no solo atendiendo a su relevancia en la actualidad sino también a su carácter de documento histórico”.
“No habrá que emplear la fuerza, ni habrá que andar con fusiles por la calle, ni metiéndole miedo a nadie”.
¿Pudiera sugerir que el viejo escritor se fue con el viejo año? ¿Que 2024 se lo llevó de un soplo? ¿Me creerían?
‘Muestrario del mundo o Libro de las maravillas de Boloña’, de Eliseo Diego, evoca ficciones que no se podrán resolver.
La desgracia de Tamara es infinita; más difusa que la bola del mundo, más caliente que la arena del Sahara, más pesada que la Antártida; más profunda que la desesperación, la desolación y la desesperanza, todas juntas.
Leí que Michael H. Miranda (Cuba, 1974) ha escrito un libro que son muchos libros. Obsesivo como es, tanto con la escritura como con la lectura, ha ensartado para una sola puntada el material no sobrante de unos dos años de lectura.
El ‘Diario de Kioto’, de Ernesto Hernández Busto describe cómo, antes de dominar su arte, el espadachín japonés debe aprender a estarse quieto sobre una columna de cuatro pies.
Leo ‘Tía buena. Una investigación filosófica’ (Círculo de Tiza, 2023), de Alberto Olmos.
Ser cubano es una combinación sin igual de presunciones y malentendidos, que implica aceptar una condición cada vez más patética y abstrusa.
Desde los mitos antiguos y las escrituras sagradas hasta la ciencia cognitiva, el número siete teje un tapiz de misterio y reverencia. ¿Por qué cautiva tanto a la humanidad este número tan singular?
Alexis Romay (La Habana, año impreciso, después de 1959). Narrador, poeta, traductor y columnista. Ha publicado varios libros de poesía y dos novelas. “Diversionismo ideológico” es la columna semanal de siete décimas que publica en el medio digital independiente cubano ‘14 y Medio’.
El COVID-19 no quiere a los cubanos. Somos especímenes nefastos, tubos de ensayo insuficientes: no tenemos visas, no somos ciudadanos del mundo. No cimentamos su campaña de viralidad. En todo caso, la boicoteamos. Si el virus arriba a Cuba, perece en Cuba.
La gente ya no conversa: chatea y envía emojis. Todo ello alimenta la ambigüedad idiomática. Actualmente, el debate en torno al color de los emojis es tétrico. Contamos con emojis blancos, negros, amarillos, mestizos, familias hetero y homosexuales. Pero lamentablemente tenemos emojis de perros y gatos de una sola raza. ¡Con tanta variedad que hay!
Informe del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia de la OEA sobre la elección presidencial de Venezuela para el secretario general Luis Almagro.
Me levantó la saya y metió la mano por un costado del blúmer, directo a la vagina.
A veces, el socialismo parece ser sólo una larga lista de todo lo que no puede hacerse.
“Me interesa saber que, cuando voy a ver una obra de teatro experimental, no la encontraré en mi móvil, ni en Netflix. Sé que tengo que estar allí. Es revolucionario, porque me obliga a salir de mi casa”.
Entrevista a la cantante, músico, actriz y presentadora cubana Lucrecia. Una conversación en la que hablamos sobre su relación con la Reina de la Salsa, sobre el enorme trabajo en ‘Celia Cruz: El musical’, los premios Alegría de Vivir, sobre sus últimos meses de trabajo y sobre su más reciente trabajo, ‘De mil maneras’.
“Muchos de nosotros hacemos periodismo y a la par hacemos activismo. Uno lo que tiene es que diferenciar los roles, y sobre todo ser consecuente con la ética de la profesión. Yo no voy a mentir. Sea cual sea la causa que defienda, mi compromiso es con la verdad, no con un partido político, no con una causa”.
Archivo Cuba acaba de concluir un largo y exhaustivo esfuerzo para revisar el número de muertes por causas políticas durante la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1958).
El año 1973 no es superior a otros de la década, pero el aniversario 50 de las películas seleccionadas aquí se convierte en motivo suficiente para recordarlas.
“Duermo como un niño. Cuando pongo la cabeza en la almohada nada me perturba”: así vivía mi padre, con el ingenuo individualismo de los dioses.
Una reconstrucción de un vacío, de un desastre, de algo que ya no tiene solución: como representar un lugar muerto.