La resistencia de la dignidad contra los que quieren abatirla, podría describirse como la batalla entre una planta y un árbol. La planta es la caña de azúcar; el árbol, la palma.
La resistencia de la dignidad contra los que quieren abatirla, podría describirse como la batalla entre una planta y un árbol. La planta es la caña de azúcar; el árbol, la palma.
Este perfil pretende desentrañar la compleja narrativa de una mujer que se ha convertido en símbolo tanto del sueño americano como de la naturaleza de la política estadounidense.
Hezbolá al borde de la guerra con Israel al expirar el ultimátum; el inminente discurso de Nasralá hace temer un nuevo conflicto en la zona.
Time: “Thomas Matthew Crooks, de 20 años y cuyos motivos siguen sin estar claros, fue identificado como el único sospechoso del intento de asesinato de Trump”.
“El mar es lo que nos hechiza, exalta y conmina. La selva, como el mar, es la multiplicidad de posibilidades, el misterio, el reto. El temor a perdernos y la esperanza de llegar”.
Un ejemplo para alertar sobre los efectos de la precariedad socioeconómica sobre la gestión cultural y patrimonial, la fragilidad de los individuos y las familias, y la desprotección de la memoria cultural.
WSJ: “El casi atentado en el mitin de Pensilvania es milagroso y podría ser un momento político redentor”.
POLITICO: “Los republicanos predicen que el tiroteo en el mitin de Trump facilitará el camino a la Casa Blanca”.
De no ser mucho pedirte, desde esta otra muerte que es el exilio de mentiritas, intentemos los dos renacer juntos para la próxima película, Lillian Roth, cuando nos sorprenda el primer invierno sin dictadores en La Habana.
“Esta es una profesión de altibajos y la única forma de sobrevivir es ser una línea recta. No dejar que el éxito o el fracaso se te suban a la cabeza o te destruyan, sino siempre enfocarte en lo único que importa: la próxima película”.
La ficción del proyecto social cubano despojó de sentido a palabras y conceptos. De tanto uso, Castro el mayor logró que revolución o soberanía fueran palabras tan vacías como patria o, incluso, muerte.
Lo que queda de la comunidad judía de Cuba es poco: unos cuantos centenares de personas, quienes, en su mayoría, sueñan con abandonar el país. Damaris Betancourt ha querido fotografiar a los que, a pesar de todo, se quedaron, tal vez contra su propia voluntad.
No he conocido a una sola mujer que no haya sido violentada de una manera o de otra.
Las artes visuales y la resistencia a las políticas institucionales.
Una mirada a la obra de Lázaro Saavedra, José Ángel Toirac, Sandra Ceballos y Ezequiel Suárez.