La administración Biden tiene previsto anunciar este mismo jueves una nueva normativa que permitirá a los funcionarios de inmigración deportar a los inmigrantes que no reúnan los requisitos para obtener asilo en Estados Unidos en una fase más temprana del proceso, según han informado a CBS News tres fuentes conocedoras de los planes internos.
La normativa del Departamento de Seguridad Nacional se aplicaría a los inmigrantes que soliciten asilo tras cruzar ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México, según las fuentes, que solicitaron el anonimato para hablar de la norma antes de su anuncio formal.
Daría instrucciones a los funcionarios de asilo del gobierno para que apliquen ciertas barreras al asilo que ya forman parte de la legislación de Estados Unidos durante las llamadas entrevistas de miedo creíble. Este es el primer paso en el proceso de asilo, que dura años. Los que superan estas entrevistas pueden solicitar asilo ante un juez de inmigración, mientras que los que no las superan pueden ser deportados rápidamente.
La legislación estadounidense prohíbe el asilo a los inmigrantes que puedan suponer un peligro para la seguridad pública o nacional. La norma permitiría a los funcionarios rechazar y deportar a los migrantes de estas categorías poco después de que crucen la frontera.
La norma, cuyo ámbito de aplicación es relativamente limitado, es una de las diversas medidas que el gobierno de Biden ha estado estudiando para restringir el acceso al sistema de asilo de Estados Unidos, en un contexto de aumento de las solicitudes en los últimos años, impulsado sobre todo por los inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera sur.
Los representantes del Departamento de Seguridad Nacional y de la Casa Blanca no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
El presidente Biden también está considerando la posibilidad de invocar una autoridad presidencial de gran alcance para promulgar una restricción más amplia sobre el asilo antes de las elecciones de noviembre, dijeron fuentes con conocimiento de las deliberaciones a CBS News. La autoridad, conocida como 212(f), permite a los presidentes suspender la entrada de migrantes cuya llegada se considere perjudicial para los intereses de Estados Unidos. El ex presidente Donald Trump invocó la ley para justificar varias restricciones a la inmigración, incluida una prohibición de viajar a países predominantemente musulmanes.
El presidente aún no ha anunciado una decisión final sobre la orden 212(f) que lleva meses barajándose.
Aunque la próxima norma no afectará a un número masivo de inmigrantes, refuerza un cambio de política del Sr. Biden, que a principios de su presidencia prometió “restaurar” el sistema de asilo de Estados Unidos.
Pero tras los niveles récord de detenciones de inmigrantes en la frontera sur, más de 2 millones en los dos últimos años, y la consiguiente reacción política, la administración de Biden ha promulgado y propuesto normas de asilo más restrictivas.
El año pasado, la administración publicó una normativa que descalifica a los inmigrantes para recibir asilo si entran ilegalmente en Estados Unidos tras no haber solicitado protección humanitaria en un tercer país, como México.
La administración ha combinado esta restricción con una ampliación sin precedentes de los canales para que los posibles migrantes lleguen legalmente a Estados Unidos. Esto incluye una aplicación telefónica que permite a los inmigrantes en México programar su paso por los pasos fronterizos oficiales y un programa que permite a algunos inmigrantes volar a Estados Unidos si tienen patrocinadores estadounidenses.
Tras alcanzar niveles récord en diciembre, los cruces de migrantes por la frontera sur se han desplomado más de un 40% este año. En abril, los cruces ilegales disminuyeron a aproximadamente 129.000, la segunda caída mensual consecutiva, según datos internos de la Patrulla Fronteriza obtenidos por CBS News.
Las autoridades estadounidenses afirman que el drástico descenso de la inmigración se debe al aumento de las deportaciones y a la intensificación de los esfuerzos de México para impedir que los inmigrantes lleguen a la frontera estadounidense. Las autoridades del Estado de Texas también han atribuido la disminución de los cruces a sus acciones, incluidos los kilómetros de alambre de púas que han instalado a lo largo de tramos de la frontera.
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