El fortalecimiento de los lazos
Cuba y Bielorrusia, dos naciones históricamente en estrecha alianza con Rusia, están estrechando aún más sus lazos tanto económica como militarmente. Esta floreciente relación se produce en medio de tiempos turbulentos, tras la controvertida invasión de Ucrania por el presidente ruso Vladimir Putin en 2022.
Profundas raíces diplomáticas
Durante más de tres décadas, Cuba y Bielorrusia han disfrutado de una relación diplomática amistosa. Incluso tras la escalada de la situación en Ucrania, ambos países se han mantenido inquebrantables en su apoyo a Rusia. Durante un viaje a Moscú en noviembre de 2022, el apoyo del presidente cubano Miguel Díaz-Canel a Putin le valió a Cuba un retraso en el pago de la deuda, un salvavidas crucial dadas las dificultades económicas de Cuba y la creciente inflación.
Aumenta la colaboración militar
La intensificación de la alianza está a punto de tomar una dirección militar. Si el Kremlin busca ayuda, Cuba se está preparando para ofrecer apoyo militar. Curiosamente, las fuerzas especiales cubanas se entrenarán pronto en Bielorrusia, lo que plantea interrogantes sobre la posibilidad de que estas tropas sean desplegadas en los frentes de Ucrania.
Con el 4,2% de su PIB dedicado a la defensa y una formidable fuerza militar activa de 50.000 efectivos, Cuba no es un peso ligero. Las recientes visitas del ministro de Defensa cubano a Moscú y Minsk, del 29 de junio al 1 de julio, ilustran aún más la profundización de los lazos en materia de defensa y geopolítica.
La conexión china
La trama se complica con las revelaciones de fuentes estadounidenses sobre la existencia de una base de espionaje china encubierta en Cuba desde 2019. Esta instalación supuestamente intercepta señales electrónicas de EEUU, lo que indica la intrincada red de alianzas y rivalidades globales. Este dato, no obstante, ha sido desmentido tanto por China, como por Cuba. Analistas estadounidenses sostienen lo contrario.
¿Cubanos en Ucrania?
Ha habido avistamientos de voluntarios cubanos colaborando con el ejército ruso y el tenebroso Grupo Wagner en Ucrania. El paradero y las funciones de estos combatientes cubanos, especialmente tras la rebelión de Prigozhin, siguen siendo un misterio.
Incentivos a la inmigración y lazos tecnológicos
Una ley recientemente ratificada por el presidente Putin allana el camino para que los inmigrantes obtengan la ciudadanía rusa al alistarse en el ejército ruso. Esto podría facilitar una cooperación militar aún más estrecha entre Rusia y Cuba. Además, las dos naciones están explorando la posibilidad de estrechar los lazos en materia de tecnología militar, con numerosas iniciativas conjuntas en preparación.
Implicaciones y oportunidades económicas
A pesar de la agitación internacional, tanto Bielorrusia como Cuba prevén un crecimiento económico para el próximo año. Se prevé que una parte significativa de este repunte económico sirva para financiar sus respectivas expansiones militares.
En una notable reunión celebrada en Sochi (Rusia), el primer ministro bielorruso, Golovchenko, transmitió a su homólogo cubano, el primer ministro Marrero Cruz, la necesidad mutua de reforzar las relaciones económicas para contrarrestar las presiones externas.
El ministro de Asuntos Exteriores bielorruso, Serguei Aleinik, también ha apoyado abiertamente a Cuba contra las sanciones económicas y financieras de Estados Unidos. Este apoyo mutuo se está materializando en acuerdos comerciales, sobre todo en el sector siderúrgico y farmacéutico.
La rápida integración de Cuba en la Unión Económica Euroasiática (UEE) consolida aún más su intención de tejer relaciones económicas más estrechas con sus aliados orientales.
Aguas geopolíticas inciertas
Mientras florecen los lazos económicos y se intensifica la cooperación militar, los esfuerzos mutuos entre Bielorrusia y Cuba podrían remodelar el panorama geopolítico. Su peso combinado podría generar incertidumbre en la política mundial, lo que justificaría un estrecho escrutinio por parte de los actores internacionales.
Ocho de cada diez familias cubanas afectadas por la emigración
Un estudio sobre migración en Cubarevela que 81,5% de los encuestados tiene un familiar que emigró en el último año. La crisis económica, falta de alimentos y un futuro incierto lideran las razones.
