Se ha producido un importante acontecimiento en los procedimientos preliminares relativos a los infames atentados terroristas del 11 de septiembre. Ramzi bin al-Shibh, uno de los principales artífices de los atentados, ha sido declarado no apto para ser juzgado por el tribunal militar de Guantánamo debido al deterioro de su salud mental. Al parecer, su estado mental actual se debe a las duras condiciones de reclusión, que incluyen prolongados episodios de tortura, privación del sueño y submarino.
Principales hechos destacados
- Ramzi bin al-Shibh, de 51 años, uno de los principales planificadores de los atentados terroristas del 11-S contra el World Trade Center de Nueva York, ha sido declarado incapaz de participar en las audiencias preliminares.
- Varios psiquiatras y psicólogos militares han diagnosticado a bin al-Shibh un trastorno de estrés postraumático con rasgos psicóticos, agravado por un trastorno delirante.
- Esta reciente actualización se desprende de un documento del tribunal de Guantánamo hecho público el viernes 22 de septiembre.
Dada la frágil salud de bin al-Shibh, el juez militar ha decretado que su caso se aísle de los demás casos de prisión preventiva en curso y se trate como un asunto independiente.
El abogado defensor de Ramzi bin al-Shibh atribuye el deterioro de la salud mental de su cliente a las condiciones inhumanas a las que fue sometido durante su encarcelamiento por la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA). En particular, el “New York Times” ha revelado, basándose en expedientes judiciales, que bin al-Shibh fue sometido a graves torturas, como el ahogamiento simulado, la privación del sueño y otras graves formas de maltrato.
Detenido en Pakistán en septiembre de 2002, bin al-Shibh fue clasificado como “detenido de valor especial” y permaneció bajo custodia de la CIA durante aproximadamente 1300 días. En 2006 fue trasladado al tristemente célebre campo de detención de Guantánamo, situado en una base militar de Cuba, un centro condenado reiteradamente por sus pésimas condiciones de reclusión.
Los cargos contra bin al-Shibh son gravísimos. Se le implica como figura central en la orquestación de los atentados del 11 de septiembre, presuntamente ayudando en la creación de una célula terrorista en Hamburgo.
Al líder de esta célula se le ordenó pilotar uno de los aviones que finalmente se estrellaron contra el World Trade Center de Nueva York. Los atroces actos del 11 de septiembre de 2001 culminaron con la trágica pérdida de casi 3000 vidas en Nueva York, el Pentágono en Washington y Pensilvania.
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