El coco se convierte en un espacio de refugio y nostalgia, donde el pájaro migrante se encuentra consigo mismo.

El coco se convierte en un espacio de refugio y nostalgia, donde el pájaro migrante se encuentra consigo mismo.
Roxanna Marte es una narradora, catedrática y estratega cultural dominicana. Es directora del colectivo literario CUENTARD, creado en 2018. ‘País imposible’ es su primera novela.
¿En qué época estoy viviendo? ¿En qué época estamos viviendo? ¿Y cuál es la época que ahora vive el Estado cubano?
Pero su expansión global, la resistencia que pueda encontrar o la posibilidad de que inspire una contrarrevolución ya no dependen de él.
La compañía de gas y petróleo lucha por recuperarse de pérdidas récord tras la invasión a gran escala de Ucrania, que destruyó su modelo de negocio.
En 1959 Cuba no buscaba ni necesitaba ʻtrascenderʼ el sistema capitalista.
El ODC señala el doble estándar del discurso oficial cubano, que deja en entredicho la supuesta lucha por la justicia global.
Otaola y otros que quieren ver la Isla arder están a 90 millas de distancia, mientras exhortan a los que estamos aquí a poner el muerto.
Cuando utilizo los diminutivos, siento lo frágil de aquellos días. La dosis de melancolía que acompaña mis momentos de plenitud.
La fatalidad demográfica, a la vuelta de décadas y décadas de castrismo “de todo el pueblo”, demostró ser más contrarrevolucionaria que el fantasma de la democracia.
En la pantalla de mi televisor, la pizarra humana parecía respirar, sincronizada o con desfasajes, mucho mejor que cualquier animación actual.
Heberto Padilla aprovechó su condición de chivo expiatorio para protagonizar una farsa que era, también, una llamada de auxilio ante los ojos de Occidente.
Informe del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia de la OEA sobre la elección presidencial de Venezuela para el secretario general Luis Almagro.
The Economist: “Cada vez parece más probable que la esperanza en Venezuela vuelva a ser aplastada. Los venezolanos de a pie pagarán el precio”.
La editorial Betania publicará este otoño todas las cartas de Gastón Baquero a Lydia Cabrera, en una edición preparada y prologada por Ernesto Hernández Busto.
Europa está en alerta máxima tras una serie de presuntos atentados y de sabotajes vinculados a Moscú, que hacen temer intentos rusos de desestabilizar el continente.
El anuncio, hecho público a través del registro del Ministerio del Interior, supone la primera vez que Rusia pone en su punto de mira a un dirigente extranjero.
Ataques aéreos israelíes sobre Rafah, Gaza, en el inicio de las conversaciones para un alto el fuego de 6 semanas. Se critica la escalada, pues deja sin escapatoria a más de un millón de refugiados.
José Raúl Gallego es periodista e investigador. Estudiante del doctorado en Comunicación de la Universidad Iberoamericana y miembro del Observatorio de Libertad Académica.
El hambre sigue siendo un arma de guerra y dominación. Su lógica perversa está presente en sociedades subordinadas a gobiernos autoritarios.
¿Para qué ha de servir este año nuevo, para acorralar más a los cubanos en su propia tierra, para debilitarles más el ánimo con la desconfianza de sí propios, para tirar unas cuantas piedras doradas y pulidas, como protesta única, a la cara de bronce del opresor?
Numerosas vertientes protestantes han llegado como competidoras al otrora hegemónico catolicismo en el “mercado” de las almas —o la espiritualidad— de los iberoamericanos.
“Soy parte de una camada de escritoras que empezó a publicar a mediados de la década pasada, en medio de un gran auge de las editoriales independientes que dieron una voz a las autoras y autores jóvenes del momento”.
‘Making of’ de una entrevista que no fue con el escritor Sergio Ramírez.
Una Cuba cubierta de harapos pintorescos, poblada por sujetos serviles, desesperadamente xenófilos, humildes al borde de la miseria y siempre listos a gritar ‘¡Bienvenido, Míster Marshall!’
Dice Chocolate MC: “suelta la corona, que es mía.” Sin embargo, su reinado va a ser discutido por otros, que también se sienten dueños del título. Pero, ¿quiénes son esos reyes?
Ana de Armas se mantiene estoicamente comprometida con su personaje, aunque el resto de la película conspire para ahogarla en las extravagantes marismas del grotesco.