Martí es nuestro equipo de fútbol, una suerte de grandeza manejable, a falta de la real, la de todos los días de un país normal.
Martí es nuestro equipo de fútbol, una suerte de grandeza manejable, a falta de la real, la de todos los días de un país normal.
Me digas lo que me digas, baile contra quien baile, yo siempre voy a subir la apuesta y a trastocar la lógica del juego, maldita sea.
Una movida hueca, que sólo refuerza el trágico ciclo de las relaciones EUA-Cuba.
La esperanza y el cambio. El mensaje está claro: construir un mundo nuevo y mejor con los fragmentos del pasado.
En un tiempo donde los algoritmos persiguen tendencias y la atención se diluye, lo que sigue importando es el trabajo lento de construir una vida al servicio de la expresión.
Pongamos que el vestido le ha servido de segunda piel, aquella con la que ha podido no ya camuflarse, sino habitar desde el arte las adversidades de la emigración o el exilio.
Cuando las masas digitales comenzaron a atacar a Carlos Alberto Montaner, comprendí que algún resorte había estallado en secreto en nuestra alma nacional.
Las experiencias adquiridas durante la perestrunka le sirvieron al Estado cubano para rearticularse frente a la nueva realidad poscomunista.
Ahí, donde reina un individualismo que pone en segundo lugar cualquier otro valor, el único aspecto donde pareciera reinar lo colectivo es en aquella área que debía ser precisamente la más individual e íntima: la vida sexual.
Hablar de su estilo es un enorme signo de interrogación, porque para Jamila Medina la literatura nunca es juego de composición sino de exploración.
No sabrá siquiera / De su propia Muerte / Muerte ignorada / Quizás peor que la muerte que duele / La que deja constancia y espanto de decir / “Ah, miren, estoy muriendo” / El tiempo es horror / El infinito.
El viceministro cubano de Asuntos Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, la persona de contacto cubana en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, habla con el periodista de inmigración y política de CBS News, Camilo Montoya-Galvez.
Dicen que hay tipos matando perros. Y viejitos que se desmayan bajo el sol.
La frontera entre Estados Unidos y México refleja los cambios económicos y el impacto en la comunidad de la intensificación de las medidas de seguridad.
El conflicto entre Irán e Israel, impulsado por tensiones religiosas y geopolíticas profundamente arraigadas, da forma a su duradera y compleja rivalidad.
La RAE critica las directrices sobre “Lenguaje no sexista en la administración parlamentaria”, argumentando que distorsionan el español sin avanzar en la igualdad de género.
Desde los mitos antiguos y las escrituras sagradas hasta la ciencia cognitiva, el número siete teje un tapiz de misterio y reverencia. ¿Por qué cautiva tanto a la humanidad este número tan singular?
El presidente Joe Biden publica una orden ejecutiva para establecer estrictas normas de seguridad y privacidad para la IA.
Se ha tiempo especulando sobre algo que ni siquiera el propio poeta se molestó en aclarar: Heberto Padilla fue el Caballo de Troya de Fidel Castro.
Desde la academia europea, el debate sobre el totalitarismo es un asunto taken for granted. El rechazo a procederes “de derecha” legitima un pendular hacia la utopía y la mistificación del sistema “de izquierda”, aderezado por esa “singularidad” tropical de lo revolucionario de la que Cuba es paradigma.
Cuando los grandes paquidermos gubernamentales se hayan hundido del todo, INSTAR (Instituto de Artivismo Hannah Arendt), del que Tania Bruguera es directora, cobrará relieve como uno de los principales centros de creación, activismo, pensamiento y comunicación en Cuba.
Maldito Menéndez: «Creo que el arte gusano será el arte cubano que contemple la historia del arte en el futuro, pues será el único arte representativo del periodo castrista».
La bruja determina las leyes de los ámbitos que ocupa. Nunca se adapta. Es un ente contundente, una fuerza transformadora.
Su motivación era solo una: lograr que Cuba fuera un país más justo. En medio de la madrugada, cuando todos dormían, la vigilante se colaba por la ventana, agarraba una almohada y se subía encima de alguno de los corruptos que sobraban en el ambiente: un viceministro, un director de empresa… Y los dejaba sin aire. Los ahogaba.
“Mi trabajo ha estado relacionado con la pobreza del país, no como denuncia, sino porque soy parte de eso: del descalabro. Soy parte de la psicología del hombre aislado. El que da vueltas y vueltas sobre lo mismo y ha llenado toda su tierra de huellas. Son las grafías de lo perdido, de la sequía y el abandono”.